El Parlamento autonómico de Castilla La Mancha acaba de aprobar una Ley de Apoyo a la Maternidad, que incluye la creación de una red de apoyo integral a la mujer embarazada.
¡Qué alegría da ver reflejado en una ley el derecho a la maternidad! Aunque es una obviedad, es un primer paso para el futuro de una sociedad, tanto la española como la europea, cada vez más vieja y con una pirámide de edad transformada en un romboide, por la falta de niños en la estructura social y económica. Ahí está la clave, no hagan más números en el Pacto de Toledo por las pensiones.
¡Qué alegría ver convertido en ley el esfuerzo de más de 48.000 ciudadanos manchegos que presentaron esa iniciativa legislativa ciudadana en su Parlamento y éste ha escuchado la voz de la calle! Esto permitirá poner en marcha medidas, fomentar acciones educativas y sociales, exigir derechos, ayudar a las mujeres, y de modo especial, a las mujeres en situación de exclusión social, discapacitadas, menores de edad y emigrantes... ¡que suerte tienen los ciudadanos de Castilla La Mancha!
Y la Comunidad castellano manchega no ha sido la primera en disfrutar de una ley así, Castilla-León, la Comunidad Valenciana, Canarias, Galicia y Murcia ya tienen aprobada su norma y otras comunidades autónomas están tramitando leyes similares.
En Andalucía, a pesar del apoyo ciudadano a la iniciativa legislativa Redmadre, con más de 93.000 firmas entregadas, nuestro Parlamento no tuvo visión política, con mayúscula, y, volvió a dejarnos entre las regiones más desfavorecidas. Seguro que la noticia de Castilla La Mancha hará reflexionar a nuestros parlamentarios andaluces y pondrán pronto en marcha la publicación de una ley de apoyo a la mujer embarazada y de promoción del derecho a la maternidad. Andalucía no puede quedarse atrás.
Juan Antonio Jurado De Sevilla
