Continúan declarando los doce líderes independentistas catalanes sentados en el banquillo del Tribunal Supremo por la celebración del referéndum ilegal del 1-O y la declaración unilateral de independencia de Cataluña el 27 de octubre de 2017.

Después de que la Sala oyese la semana pasada al exvicepresident Oriol Junqueras y al exconseller de Interior Joaquim Forn, el siguiente en declarar en la cuarta jornada del juicio ha sido Jordi Turull, exconseller de Presidencia. "Quisimos dar una salida política y pacífica al movimiento independentista", ha dicho tras una pregunta del fiscal Jaime Moreno.

Le ha preguntado el fiscal si fue advertido tres veces por el Constitucional. Turull responde que no, que fue una. "Había ganas de firmar el decreto de convocatoria del referéndum. Era nuestro compromiso con los ciudadanos de Cataluña. No lo hacíamos conscientes de ninguna ilegalidad, todo lo contrario (...) lo ponderamos todo", ha explicado.

"Nosotros no desconvocamos el referéndum, es una obviedad", dice Turull, que insiste en señalar que convocar un referéndum no es delito. "A nosotros se nos está persiguiendo por una cosa que no es delito. Menos mal que no es delito: hoy llevo un año en la cárcel", afirma.

Turull dice que cuando recibió la providencia hablaron con servicios jurídicos. "Nos personamos en el TC. Hicimos un ejercicio de ponderación. Un político debe ponderar todo, lo que dice las leyes. Ponderar que la ley se debe al Parlamento de Cataluña, ponderar que se despenalizó los referéndums, ponderar que votar nunca puede ser delito en una democracia y ponderar nuestro compromiso con los ciudadanos de Cataluña", dice. "Fuimos actuando ponderándolo todo", asegura.

"¿Firmó el decreto de convocatoria del referéndum? Sí, lo firmé". Dice que lo firmaron todos los consejeros porque era su compromiso con los ciudadanos, por el compromiso del Govern y porque había ganas de firmarlo.

Desde 2012 a 2017 el Gobierno central ha incumplido varias sentencias del Constitucional, asegura Turull, que usa esto para decir que no todo el mundo es igual ante la ley

Dice que no pensó que desobedecía al TC porque no le había apercibido. "Estábamos convencidos de que lo que habíamos aprobado en el Parlament, si había voluntad política, tenía un perfecto encaje en la legalidad", asegura.

Le pregunta el fiscal si no pensaron en pararlo después de la resolución del TC. Dice que lo ponderaron pero que además, según la propia ley del Constitucional, se le tenían que haber pedido explicaciones. Desde el 12 de septiembre hasta que ingresó en prisión nunca usó el TC sus poderes coercitivos, "así que no sería tan grave", se justifica.

"Desde 2012 a 2017 el Gobierno central ha incumplido varias sentencias del Constitucional", asegura Turull, que usa esto para decir que no todo el mundo es igual ante la ley.

Le pregunta el fiscal por los gastos del referéndum y Turull asegura que los gastos eran para procesos electorales. "No se gastó ni un euro para el referéndum, no se emplearon fondos para el referéndum", afirma.

En el 1-O se utilizaron locales públicos para organizar la consulta. "¿Se destinaron a una finalidad declara ilegal?", pregunta el fiscal, Jaime Moreno. Turull responde que sí, pero que la finalidad era "una actividad que no merece reproche penal".

"¿No llamó a defender los colegios?", pregunta el fiscal. "No, nadie del Govern lo hizo", afirma Turull

Turull afirma que los anuncios mostrados en el juicio salieron en TV3 y en Catalunya Radio. "Se aprovechó porque se hizo en la Generalitat", asegura.

Turull se ha defendido de las acusaciones del fiscal a propósito de la organización del 1-O. "No hay ningún encargo ni ningún presupuesto para Unipost", ha dicho Turull en referencia a los contratos con la empresa encargada de distribuir el material del referéndum ilegal.  

Turull explica que el único precedente del Gobierno sobre el 1-O era el 9-N, una jornada en la que "se votó de forma tranquila". "La gente votó de forma tranquila y así íbamos nosotros al 1 de octubre", dice Turull sobre la consulta del 9 de noviembre de 2014 organizada por el entonces presidente de la Generalitat, Artur Mas.   

"¿No llamó a defender los colegios?", pregunta el fiscal. "No, nadie del Govern lo hizo", afirma Turull. Sobre las asociaciones ANC y Ómnium contesta: "No sé".

Turull insiste en una de las ideas fuerza de su declaración: había que buscar el equilibrio entre cumplir la ley y poder votar. "Hicimos una cosa que podía compatibilizar que se llevaran a cabo las diligencias de la magistrada y que la gente pudiera votar: el censo universal", dice Turull sobre la jornada del 1-O. Ese método, puesto en marcha a las ocho de la mañana del 1 de octubre, permitía a los ciudadanos votar en cualquier colegio electoral.   

Turull asegura que la DUI era una "declaración política" porque "el Parlament hace política”.