Fernando Abril-Martorell ha logrado mantenerse como presidente de Indra a pesar del cambio de Gobierno
Suma y sigue. Indra ha anunciado este lunes la compra de la empresa Advanced Control Systems por 46 millones de dólares, unos 39,8 millones de euros. Se trata de una compañía norteamericana especializada en fabricación de sistemas de control y operación de redes de transporte y distribución de energía.
Hasta ahí, todo normal. Lo llamativo es que Indra ha pagado 40 millones de euros por una empresa que en 2017 facturó 23,5 millones de dólares, unos 20 millones de euros. Una compra un poco cara. Advance Control Systems (ACS hasta que se entere Florentino Pérez) cuenta con unos 120 empleados y con unos 360 clientes.
Según la compañía que preside Fernando Abril-Martorell, ACS puede triplicar o cuadruplicar sus ventas en un plazo de cinco años
Las previsiones, sin embargo, no pueden ser más positivas. Según la compañía que preside Fernando Abril-Martorell, ACS puede triplicar o cuadruplicar sus ventas en un plazo de cinco años. Estima, además, que el mercado de redes de transporte y distribución de energía crezca al 20% anual, hasta los 1.800 millones de dólares en 2021.
En la nota remitida a los medios, Indra destaca que esta operación le permite acceder “a los mercados de Estados Unidos y Canadá, región en la que se concentran más de 3.200 utilities, la gran mayoría municipalidades y cooperativas, que son el objetivo prioritario de las soluciones de Indra en este mercado”.
Es el estilo de gestión de Abril-Martorell: si quieres ganar más, compra
Es un esquema similar al utilizado en la compra de Tecnocom: ACS mantendrá su actual estructura de gestión mientras que Indra destinará ejecutivos nacionales a dicho equipo “con el objetivo de capturar las sinergias comprometidas en el Plan de Negocio”, señala el comunicado.
Es el estilo de gestión de Abril-Martorell: si quieres ganar más, compra. No importa lo que cueste. Paga el accionista.
Además, es la única forma de aumentar ingresos: comprar ingresos ajenos.