“Hemos decidido iniciar un programa que eliminará varios cientos de posiciones generales en muchos de nuestros equipos”, que “afectará a muchas partes de Zalando, incluso a nivel de liderazgo senior”, anunciaba la carta firmada por los dos codirectores ejecutivos de Zalando, Robert Gentz y David Schneider, dirigida a empleados e inversores. 

La plataforma alemana de venta de moda online no ha especificado cuántos cientos de trabajadores se verán afectados, pero sí ha anunciado que han empezado las negociaciones entre los representantes de la compañía y los de sus trabajadores, con el objetivo de comenzar a concretar los términos y el impacto que acabará teniendo la medida. 

“Todavía no sabemos con total claridad cuál será el impacto dentro de cada departamento, pero sabemos que nuestras posiciones de operaciones de primera línea en los centros de logística, atención al cliente y tiendas outlet, así como los roles operativos en nuestros Zalando Studios, no se verán afectados”.

Aseguran que es una decisión difícil “sin embargo, sabemos que esto es lo correcto para Zalando y para todo el éxito y el impacto que está por venir”.

La justificación de estos despidos se encuadra en el boom que experimentó la compañía con la pandemia y las restricciones de la movilidad, que potenciaron el comercio online. 

“Apoyándose en un cambio general de los consumidores hacia las compras online y en los fuertes vientos de cola que soplaron durante la pandemia en 2020 y 2021, Zalando ha experimentado un crecimiento excepcional en los últimos años”, añaden Robert Gentz y David Schneider. “Nos fue muy bien como negocio y nos beneficiamos de invertir en nuestros equipos e infraestructura”.

Pero los buenos tiempos acabaron, algo que ya advertían sus números rojos perdiendo 47,3 millones de euros en el primer semestre de 2022. La compañía lo avisó nada más comenzar el año: el 2022 iba a ser “volátil”.

“Los vientos que soplaban a favor durante la pandemia se han desvanecido desde 2022, y el entorno macroeconómico se ha vuelto más desafiante”.

“Reconocemos que no estamos donde debemos estar y, como resultado, debemos tomar medidas aún más decisivas” y dar “un paso muy difícil pero necesario”, afirman ambos ejecutivos. 

Esta decisión de ajustar plantilla supone una nueva muestra de la segunda parte de la digitalización, que está suponiendo decenas de miles de despidos. Zalando no ha sido la única tecnológica en anunciar reducciones de plantilla en las últimas semanas: Google, Amazon, Meta -matriz de Facebook-, Microsoft, Salesforce, IBM, SAP, Spotify, Paypal, Match Group, Snapchat o Dell, entre otras, también han seguido la misma estela.