Los ingresos de Orange España llevaban tres años cayendo y ha sido en el tercer trimestre de este ejercicio cuando, por fin, han vuelto a la senda positiva respecto al trimestre anterior. Hablamos de un crecimiento exiguo del 0,2%, hasta los 1.178 millones de euros, gracias al roaming por el tirón del turismo, el negocio mayorista y la venta de terminales.

Los ingresos por servicios no corrieron la misma suerte y cayeron un 1,4%, hasta los 781 millones. La buena noticia es que siguen la senda ascendente desde que tocaran fondo en el cuarto trimestre de 2020, cuando se desplomaron un 10,8%. La recuperación está siendo lenta, sí, pero la compañía ya ve luz al final del túnel y mantiene su previsión de volver a ser rentable en 2023, tal y como aseguró el consejero delegado, Jean François Fallacher, en octubre de 2021. Ya veremos qué impacto tiene en Orange la ralentización de la economía española, que podría ser más brusca de lo previsto.

El tercer trimestre, coincidiendo con la vuelta del verano, se caracterizó por una actividad comercial muy intensa, con un aumento muy significativo del número de abonados a la TV (+63,8%), que superaron por primera vez el millón (1,135 millones). En total, sin embargo, los clientes de banda ancha cayeron un 0,9%, hasta los 3,9 millones, mientras los de móvil aumentaron un 3,9% y alcanzaron los 16,8 millones.

Todo esto sucede mientras la fusión con MásMóvil sigue su curso. Fallacher es optimista y cree que Bruselas no pondrá demasiadas pegas. “No debería haber remedies (remedios) en esta operación”, afirmó. “Vamos a crear un mercado español más competitivo, sobre todo para clientes de valor”, señaló durante un encuentro con los medios.

Ni siquiera la reciente decisión de Juliane Kokott, Abogada General de la UE, de avalar el veto de la Comisión Europea a la operación Hutchison-O2 (Telefónica), ha mermado sus esperanzas. Según él, el mercado español no tiene nada que ver con el británico. “No estamos hablando de que se vaya a pasar de 4 a 3 operadores, sino de 8 a 7”, aseguró. “Vamos a competir mejor con Telefónica” sentenció.

La operación está en fase de pre-notificación y será durante el primer trimestre de 2023 cuando envíen la notificación. A partir de entonces, la Comisión Europea tendrá entre 25 y 35 días para emitir su opinión. Orange confía en obtener el visto bueno definitivo en verano de 2023.