Los resultados de Mutua en 2023 son buenos: el negocio crece mucho, el beneficio no tanto y eso se ha convertido en la constante de éxito de su presidente Ignacio Garralda: crecimiento "sostenido y rentable", pese a un entorno "complejo", marcado por el aumento generalizado de los costes.

Mutua se anotó un beneficio neto de 431 millones de euros en 2023, lo que representa un aumento del 6,3% con respecto a 2022, los ingresos por primas del grupo (incluyendo su negocio nacional e internacional) alcanzaron los 8.057 millones de euros, un 10,2% más. Y solo en España, la cifra de ingresos por primas se elevó hasta los 7.158 millones de euros, un 10,5% más.

Según explican el crecimiento se basa, principalmente, en la buena marcha del negocio asegurador de las distintas sociedades que lo integran, de tal manera que "todas las áreas de actividad" del grupo contribuyeron "de forma positiva" al resultado consolidado.

Mutua crece con fuerza, y eso a pesar de que su espíritu sigue siendo el no subir los precios en el ramo del automóvil, la clave de su negocio. Y es que el seguro de automóviles alcanzó en 2023 unos ingresos por rimas en España de 2.018 millones de euros, un 11,7% más. El Grupo destaca que la mayor parte de la subida se deriva principalmente de la captación de nuevos asegurados, con 573.094 nuevas pólizas netas en 2023, y no por el incremento del precio del seguro. 

Esto se lo pueden permitir gracias al ratio combinado que, pese a que su "estrella polar" es situarlo en el 95%, está en el 96,9%, aunque lo importante es no pasar el 100%, algo que pasa en la media del sector (101,6%). Por lo que su estrategia sigue siendo aumentar las nuevas pólizas y no el precio a los clientes. Para este año, la previsión es mantener congelado en torno al 27% o 28% de asegurados y subir de media alrededor de un 3%.

Garralda ha admitido que la estrategia está "muy volcada" con el crecimiento fuera de Madrid, donde mantiene una política "defensiva" ante el intento de asalto por parte de otras compañías. El crecimiento en la capital ya es limitado, mientras en el resto de España, las tasas de crecimiento son más altas, por lo que se espera que este año ocurra un "hecho histórico' para el Grupo: habrá más pólizas de fuera de Madrid, que en Madrid. 

Mutua es consciente de cómo ha cambiado la tendencia en cuanto a materia automovilística en los jóvenes, que compran cada vez menos coches y ya ofrece alquiler de coche por minutos y horas (Voltio), así como por días o semanas (Centauro). Ya disponen de 700 coches, con intención de llegar a 1.000 y con 110.000 usuarios, por lo que esperan ser capaces de llegar a beneficios en dos años: movilidad sin propiedad. 

Con esta situación de crecimiento rentable y maravillosa liquidez, Garralda, sigue teniéndolo claro: no se van a convertir en sociedad anónima ni van a cotizar en bolsa. Le va mejor que bien como mutualidad: "tenemos recursos propios, no lo necesitamos". 

La asignatura pendiente, el negocio internacional, siguen "apetentes" para crecer inorgánicamente, ya sea dentro o fuera de España, pero "no es fácil", no quieren "compras fallidas" y tiene que haber una oportunidad, eso sí, siempre que con una nueva adquisición no se comprometa su relación con sus socios. No busca competir con ellos. El éxito de la gestión de Garralda consiste en atesorar liquidez y luego hacer inversiones conjuntas, ya lo hizo en seguros sanitarios con Caixabank y en seguros generales y en gestión de activos (donde ya estaba muy fuerte) de la mano de El Corte Inglés. Además el Grupo lidera el ranking español de salud a través de Adeslas. Y tras un "año 2023 tranquilo", no cierran la puerta a "nuevos canales". 

Y la 'nota negativa', Muface. Si el resto de seguros van muy bien, Muface se presenta como una lacra. La razón no es nueva, se arrastra desde hace años, y la petición de Garralda se repite: el Gobierno tiene que estar dispuesto a poner más dinero para que Muface atienda a sus funcionarios. Otras aseguradoras ya han amenazado con irse del sistema, Mutua no quiere llegar a ese extremo, pero en palabras de Garralda, "antes se perdía, pero era sostenible, ahora es ruinoso". Aseguran estar en conversaciones con la Administración, hay encargados estudios, pero "hay que revisar las tarifas", "el sistema no cuadra", y esperan que se llegue a un acuerdo antes de verano: "Las empresas privadas no tienen que sufragar el déficit", sentencia Garralda.  

Garralda termina lanzando un mensaje, y debería ser escuchado al ser Mutua una de las principales aseguradoras de autos: el parque automovilístico es muy viejo, se han pasado de los 8 años de antigüedad de media, a los 14. Y esto pasa, a su juicio, por la incertidumbre que tienen los ciudadanos en cuanto a la regulación, prefieren no comprar hasta saber qué va a pasar. No entiende que no haya ayudas y planes de financiación para comprar coches nuevos, sean eléctricos o de combustión, los nuevos contaminan menos que los antiguos, usen la energía que usen.