Rueda de prensa del consejero delegado y del director financiero del Sabadell, César González-Bueno y Sergio Palavecino, respectivamente, para explicar la venta de la filial británica TSB al Santander, un acuerdo que se produce en plena OPA del BBVA pero que nada tiene que ver con ella. ¿Comprenden? Vaya por delante que en Hispanidad estamos en contra de la OPA porque nos gusta lo pequeño.

Preguntado en varias ocasiones, González-Bueno evitó pronunciarse sobre si Carlos Torres puede seguir como presidente del banco vasco en caso de que la OPA fracase, pero sin embargo afirmó con claridad que el BBVA es “un gran banco” y que tan lícito es lanzar una OPA como retirarla. En otras palabras, alabo al BBVA pero evito hablar de su presidente, Carlos Torres.

Otra cuestión significativa en la que insistió el CEO del Sabadell: la venta de TSB ha coincidido con la OPA del BBVA pero no tiene nada que ver, de tal manera que se hubiera llevado a cabo aunque no existiera la intención del BBVA de hacerse con el Sabadell. César, te creemos, aunque nos cuesta un poco, no por nada, sino porque son muchas coincidencias: se produce en plena OPA, a un precio elevado que permite un dividendo disuasorio y todo esto por iniciativa de un tercero ajeno al Sabadell. ¿No es maravilloso?

Tanto la venta de TSB como el dividendo extraordinario de 2.500 millones de euros (50 céntimos por título), pagadero cuando se cierre la transacción, durante el primer trimestre de 2026, tendrán que ser aprobados en la Junta Extraordinaria de Accionistas convocada para el 6 de agosto. Efectivamente, el BCE no ordena el reparto de más o menos dividendos, pero también lo es que tan importantes son los mandatos del supervisor como sus sugerencias. El BCE, como el Banco de España en su momento, no ordena, sugiere. ¿Dividendo extraordinario? ¿No sería mejor destinar ese dinero a ampliar el negocio o a aumentar los recursos propios y las provisiones?

A todo esto, la venta de TSB ha disparado la cotización del Sabadell este miércoles más de un 5%, frente al +1,9% del BBVA y el +0,8% del Ibex. La prima de la OPA, inicialmente del 30%, está hoy en el -9,6%. Es decir, si los accionistas del Sabadell pudieran acudir ahora al canje, perderían casi el 10% además de pagar los impuestos correspondientes. Vamos, un chollo.

Más significativo aún, los que acudan al canje, si es que el BBVA decide seguir con la operación, no cobrarán el dividendo extraordinario aunque la venta de TSB se lleve a cabo.

Pero la venta del TSB nada tiene que ver con la OPA. ¿Está claro? Insisto: en Hispanidad estamos en contra de la OPA porque nos gusta lo pequeño.