El Producto Interior Bruto (PIB) de la eurozona registró en el primer trimestre de 2022 una expansión del 0,2% y 0,4% en la Unión Europea respecto de los tres meses anteriores, lo que supone una ligera ralentización del crecimiento de la economía europea, según ha confirmado Eurostat.

En el conjunto de la Unión Europea (UE), el ritmo de expansión entre enero y marzo se desaceleró en una décima en ambos casos respecto al cuartro trimestre del pasado año. En comparación con el primer trimestre del año pasado, la economía creció un 5% en el área de la moneda única y un 5,2 % en el conjunto de los Veintisiete. 

Por países de la UE, destaca la caída de Italia (-0,2%), mientras que Francia se estanca, España crece un 0,3% y Alemania un 0,2%. El mayor ritmo de crecimiento trimestral lo registró Austria, que lidera (2,5%) el crecimiento junto a Portugal (2,6%). Por contra, el PIB se contrajo en Suecia, que cayó un 0,4%. En términos interanuales, todos los países vieron crecer su PIB y los principales incrementos se registraron en Portugal (11,9%), Austria (8,7%) y España (6,4%), mientras que las tasas más bajas se dieron en Suecia (3%) y Lituania (4,1%).