El actual contexto de crisis mundial del automóvil comenzó a mostrar signos ya en 2024 en nuestro país, como se vio en los resultados de algunas de las filiales de los fabricantes automovilísticos (como en los de Mercedes-Benz, BMW y Porsche Ibérica, aunque no en los de Renault). Al primer grupo se suma Ford España, según sus cuentas depositadas en el Registro Mercantil, donde se recoge la caída de los ingresos y el desplome de la producción, mientras la rentabilidad creció por los menores gastos laborales tras otro ERE y varios ERTEs, y el beneficio fue cuatro veces superior gracias a los dividendos franceses y la venta de la participación en Ford México Holdings.

La filial del fabricante automovilístico estadounidense dejó de fabricar la furgoneta Transit Connect en abril de 2024 en la planta de Almusafes (Valencia), donde desde entonces sólo se produce el Kuga, y así seguirá siendo hasta que se le adjudique un nuevo modelo. Aún se está esperando a que el grupo con sede en Dearborn (ciudad vecina de Detroit), en el estado de Michigan (EEUU), ofrezca más detalles del nuevo vehículo híbrido que adjudicará a su única fábrica en España para producir en 2027. En la memoria de gestión que acompaña sus cuentos se señala que Almusafes “sigue siendo una de las instalaciones de producción más importantes y eficientes del sector en Europa, como especialista en vehículos de alto valor y complejidad”. 

Jim Farley, CEO de Ford, y François Provost, CEO de Renault

 

En paralelo, cabe referir que, por ahora, “no tendrá un impacto” en la planta valenciana la reciente alianza entre Ford y Renault, que supondrá el desarrollo conjunto de dos vehículos eléctricos asequibles de Ford que serán fabricados sobre la plataforma Ampere de Renault en el norte de Francia y llegarán a los concesionarios en 2028. Esto último podría tener un efecto colateral para las fábricas que Renault tiene en Palencia y Valladolid, acercando la posibilidad de que también produzcan vehículos eléctricos (algo que el Gobierno galo y los sindicatos querían limitar a su país) y no sólo híbridos, como hasta ahora. Eso sí, al conjunto del grupo Ford no le está yendo muy bien con los eléctricos, por el momento. 

Vayamos a los resultados de 2024 de una filial que agrupa la actividad comercial de Ford en España y parte del sur de Europa, y la gestión de la fábrica de Almusafes. Los ingresos han caído un 29%, de 7.263 millones de euros a 5.187,6 millones, precisamente por el desplome de la producción: esta última se hundió un 42,76% en vehículos, hasta 121.250; un 35,26% en motores, a 271.550 unidades; un 7% en baterías, a 83.471; y un 32,94% en componentes mecanizados, a 417.530. Y lógicamente, la menor producción repercutió en las ventas, que descendió un 4,05%, a 46.979 vehículos, pese al incremento en los comerciales.

Por su parte, el resultado de explotación mejoró por los menores gastos laborales, tras otro ERE y varios ERTEs. Mientras el beneficio neto casi se cuadruplicó, pasando de 64,3 millones a 236,3 millones, sobre todo, gracias a los dividendos que recibió de la filial gala FMC France y a la venta del 6,11% que tenía en Ford México Holdings.

Cabe recordar que en 2023, Ford España elevó ventas, dejó las pérdidas y redujo deuda, pero todo ello no evitó un nuevo ERE (que afectó a 1.144 trabajadores a través de prejubilaciones y salidas incentivadas) y otro ERTE (para unos 700 empleados). Desde 2020, la filial del fabricante automovilísito estadounidense ha realizado varios recortes de plantilla: cuatro EREs, el último fue en 2024 y afectó a 1.622 empleados (el 34% de la plantilla, que ascendía a 4.800): 626 fueron despidos definitivos mediante salidas voluntarias y prejubilaciones, y se lanzó un ERTE rotatorio para otros 996 trabajadores hasta el 31 de diciembre de 2024. A todo esto se sumó un ERTE por fuerza mayor a principios de noviembre de 2024, tras la trágica DANA ocurrida en varios pueblos de Valencia, y cuando este finalizó, el Gobierno aprobó el Mecanismo Red que permitió a la planta de Almusafes establecer un nuevo ERTE más flexible desde el inicio de 2025 para los dos próximos años y que se traduce en determinados días al mes sin actividad para la planta de vehículos. Recientemente se ha conocido que el ERTE Red se prorrogará seis meses más, afectando a 4.152 empleados que cobrarán el 90% del salario y el 100% de los complementos. 

Y ojo, de cara a este año, Ford España prevé que la producción baje aún más y no alcance los 100.000 vehículos del modelo Kuga. Por tanto, los resultados tampoco serán buenos...