
“Cualquier acero o aluminio que venga a Estados Unidos tendrá un arancel del 25%”, anunciaba Donald Trump el domingo. En una charla con periodistas en el Air Force One, aseguró que los aranceles se aplicarían a las importaciones de metales de todos los países.
El decreto lo firmará esta misma tarde.
Así que, repetimos con los aranceles, igual que el lunes pasado en este inicio de semana para los mercados en los que no hay una reacción excesiva…con varias excepciones, las propias compañías estadounidenses como Alcoa, productor de aluminio que ha llegado a subir, en el intradía, un 4%; Reliance Steel & Aluminum se disparaba en preapertura un 6,3%, y Steel Dynamics, un 5,7%.
Un inciso respecto a Alcoa que, tal hemos contado en Hispanidad, sigue haciendo de las suyas en España. Como no logra vender la única fábrica que le queda aquí, la deSan Ciprián, perteneciente al municipio de Cervo (Lugo), quiere más ayudas públicas, a pesar de las muy numerosas que ha recibido en los últimos años.
Volviendo al mercado estadounidense, y a lo que os ocupa, caídas para US Steel, sin embargo, y en este caso por un asunto diferente, ya que la japonesa Nippon Steel estaría ‘revisando’ su propuesta para comprar la compañía norteamericana.
En Europa, y en compañía de Arcelor Mittal, que cae un 1,6%, la luxemburguesa Aperam, la finlandesa Outokumpu, la noruega Norsk Hydro y la alemana ThyssenKrupp. Todas han moderado sus pérdidas hasta menos de un punto porcentual.
Pero hay una empresa que nada a contracorriente. Hablamos de Acerinox que rebota más de un 4,8%.
"En el caso de Acerinox, EEUU supone actualmente el 80% de su Ebitda, por lo que una medida que elevase los aranceles sería netamente positiva y entendemos que podría aportar, en un primer momento, hasta 100 millones de euros adicionales de Ebitda", señalan los expertos del Sabadell.
Acerinox produce en Estados Unidos, tanto acero inoxidable como aleaciones de alto rendimiento a través de Haynes Internacional que compró a finales del año pasado.
“Acerinox es el principal productor de acero inoxidable de Estados Unidos, además de ser el operador más eficiente”, señala Miguel Rodríguez, gestor y socio de Horos. “Más de las tres cuartas partes del flujo de caja que genera Acerinox viene de Estados”…un mercado que ya está protegido con aranceles impuestos a China, el principal fabricante mundial, desde el año 2018.
“Aranceles adicionales impuestos a otras geografías, limitaría las importaciones de Estados Unidos, lo que le beneficia directamente a Acerinox que elimina competencia con el consiguiente impacto positivo que tendrá en los precios”.
En el caso de Acerinox, EEUU supone actualmente el 80% de su Ebitda, por lo que una medida que elevase los aranceles sería netamente positiva y podría aportar, en un primer momento, hasta 100 millones de euros adicionales
Además, Acerinox está ampliando capacidad de producción en este país, capacidad que estará a pleno rendimiento en el segundo semestre de 2026.
Pero no sólo la cotización de Acerinox lo celebra aquí en Europa sino también SSAB. “El 30% de su producción y sus ventas están en EE UU por lo que si los precios suben, se verá afectada positivamente”.
Las acciones de esta compañía, un multinacional sueca especializada en fabricación y distribución de aceros especiales, suben un 3,5%.
Según las estimaciones de Eurofer, asociación que representa al conjunto de la producción siderúrgica en Europa, en 2024, el consumo de acero en la UE descendió un 2,3%, hasta 127 millones de toneladas, por encima de las previsiones que lo situaban en el 1,8%
Una cuarta parte de todo el acero que se utiliza en Estados Unidos es importado y procedente, sobre todo, de México y Canadá, pero también de Japón y Corea del Sur.
Y aunque China es el mayor productor, apenas exporta al mercado estadounidense. Concretamente poco más 500.000 toneladas en 2024, lo que no llega al 2% del total.
Estados Unidos compra acero y aluminio al exterior por, aproximadamente,110.000 millones de dólares que destina principalmente a la industria de defensa, a la industria naval y a la automoción.
En el caso del aluminio, la dependencia del exterior de Estados Unidos es mayor ya que importa la mitad del que necesita.
Estados Unidos compra acero y aluminio al exterior por, aproximadamente,110.000 millones de dólares que destina principalmente a la industria de defensa, a la industria naval y a la automoción
Se lo compra principalmente a Canadá que le exportó 3,2 millones de toneladas en 2024, una cantidad que duplica el conjunto de las importaciones realizadas a otros países.
Pero,“el que está realmente enfermo es Europa”, añade Miguel Rodríguez. “Con niveles de demanda final muy reducidos por las caídas de producciones industriales de las grandes potencias europeas, los precios se mantienen bajos. Además, los aranceles que se van a aplicar en Estados Unidos podrían afectar negativamente al Viejo Continente, ya que el material que ahora no va a poder exportar se quedaría en el mercado europeo”.
Según las estimaciones de Eurofer, asociación que representa al conjunto de la producción siderúrgica en Europa, el consumo aparente de acero (que incluye la producción total de acero, las importaciones y las exportaciones) en la Unión Europea en 2024, descendió un 2,3%, hasta 127 millones de toneladas. Esta cifra está por debajo de las expectativas publicadas anteriormente por la asociación, según las que el descenso podría ser del 1,8%. En 2023, el consumo de acero en la UE cayó un 5,8%, hasta 130 millones de toneladas. En 2025 la recuperación del consumo aparente de acero será más lenta de lo que Eurofer había previsto anteriormente: se espera un crecimiento del 2,2%, frente al 3,8% anteriormente