Schindler se eleva este viernes en bolsa más de un 2%, celebrando los buenos resultados obtenidos en los nueve primeros meses del año. Y es que ha recuperado los niveles de facturación y pedidos preCovid, ha ganado un 26% más que en el mismo periodo de 2020 y ha aumentado la plantilla un 2,4%, pasando de 66.674 personas a 68.252.

El grupo suizo -que fabrica ascensores, escaleras mecánicas y puertas automáticas- ha logrado un beneficio neto de 645 millones de euros hasta septiembre, lo que supone un 25,7% más. Esta cifra supera los 419,8 millones obtenidos en el primer semestre, aunque el incremento ha sido menos pronunciado, pues en dicho periodo fue del 45,4%. Por su parte, el beneficio operativo (Ebit) ha aumentado un 24,4%, a 855 millones, y el margen Ebit se ha situado en el 11%.

De cara al cuarto trimestre, prevé que el impacto de la inflación del coste de los materiales y los retrasos en el sitio de construcción le seguirán afectando, aunque “salvo eventos inesperados”, confirma sus previsiones anuales 

La facturación ha ascendido a 7.751 millones, lo que supone un 7,6% más que hace un año y volver a los niveles prepandemia. Conviene destacar que ha aumentado en todas las áreas geográficas en las que opera el grupo suizo, especialmente en Asia-Pacífico, América y la región de Europa, Oriente Medio y África (EMEA), las cuales que aportan el 30%, el 26% y el 44% de sus ingresos, respectivamente.

Schindler ha recibido nuevos pedidos por valor de 8.458 millones, un 12% más, y esto le ha permitido recuperar los niveles preCovid. En nuevas instalaciones y modernización, los pedidos han crecido con fuerza, mientras que en reparaciones y mantenimiento han tenido un impulso positivo pero menor.

Eso sí, en el tercer trimestre, parece que el grupo suizo se tomó ‘vacaciones’, porque tanto el beneficio neto como los ingresos fueron muy similares a los de hace un año. En concreto, ganó 219 millones, un 0,4% menos, y facturó 2.627 millones, un 0,4% más. De cara al cuarto trimestre, Schindler prevé que el impacto de la inflación del coste de los materiales y los retrasos en el sitio de construcción le seguirán afectando, aunque “salvo eventos inesperados”, ha confirmado las previsiones anuales de que los ingresos crecerán entre un 4% y un 7% en moneda local (franco suizo) y de que el beneficio neto será de entre 787 y 843 millones de euros.