Este jueves, Ignacio S. Galán tiene otra razón más para estar pletórico, casi una semana después de haber salido de la ‘plaza’ de Bilbao por la puerta grande. Y es que el juez Manuel García-Castellón ha decidido el sobreseimiento (es decir, el archivo) de la imputación del presidente y CEO de Iberdrola, un hecho que desinfla el ‘caso Villarejo’ y lo reduce a BBVA y Púnica.

Y por supuesto, en bolsa se ha podido ver la celebración de Iberdrola: su cotización ha subido casi un 4% (+3,83%), siendo la más destacada en un Ibex ligeramente en rojo (-0,48%). Una notable subida que le sirve para reducir su distancia con la primera capitalizada de la bolsa española, Inditex, que le dio el sorpasso hace poco más de dos semanas y recuperando el puesto que la eléctrica le arrebató a finales del pasado noviembre. Además, no hay que olvidar que esta semana la cotización de la eléctrica, al igual que la de otras muchas, se ha llevado varios palos por el nuevo recargo fiscal a las eléctricas que ha anunciado el Gobierno Sánchez y del que, por ahora, hay muchas dudas y pocas certezas.

Había varias tesis: por un lado, la eléctrica defendía que no había tema en el presunto delito de cohecho; por otro, que la cuestión había prescrito y no había pruebas; y por últmo, la Fiscalía quizá ha apostado por reducir la crispación y la magnitud de piezas del 'caso Villarejo'

Volvamos al archivo de la imputación de Galán, que estará muy contento de que García-Castellón ya le haya soltado, como a Isidro Fainé y Antonio Brufau, pues hace unos meses le desimputó y le volvió a imputar en el mismo día. Había varias tesis sobre la mesa: por un lado, las de la eléctrica, defendiendo que no había tema en el presunto delito de cohecho (soborno a un funcionario público) activo continuado porque José Manuel Villarejo era policía y montó la empresa Cenyt con varios empleados y oficina en la Torre Picasso de Madrid... por tanto, no se escondía, así que sería un cohecho permitido por el Ministerio del Interior; ni tampoco en los otros presuntos delitos que se le imputaban a Galán (delito contra la intimidad y delito continuado de falsedad en documento mercantil por la contratación de Villarejo). Por otro, la cuestión de que había prescrito y de que no había pruebas, como sí sucede en la pieza del BBVA. Y por último, el hecho de que la Fiscalía quizá habría apostado por reducir la magnitud de piezas del ‘caso Villarejo’ a las que hubiera pruebas para poder darle fin mucho más pronto.

La decisión de García-Castellón se basa en una resolución de la Sección Penal Tercera de la Audiencia Nacional, que apreció la prescripción de los presuntos delitos por los que estaba investigado otro exdirectivo de la eléctrica (el ex jefe de gabinete, Rafael Orbegozo). También se han librado ya otros exdirectivos

La decisión de García-Castellón está basada en una resolución de la Sección Penal Tercera de la Audiencia Nacional, que apreció la prescripción de los presuntos delitos por los que estaba investigado otro exdirectivo de la eléctrica (el ex jefe de gabinete, Rafael Orbegozo), al haber transcurrido más de diez años entre la fecha del último hecho imputado y su citación como investigado. Dicha prescripción sirvió como argumento para que el abogado defensor de Galán, Carlos Domínguez, pidiera que se aplicara el mismo criterio a su cliente, y prescripción a la que ya aludió el propio presidente y CEO de Iberdrola el pasado verano, tras ser imputado. Asimismo, el juez también ha decretado el sobreseimiento de las causas de José Luis San Pedro y Juan Carlos Rebollo en el delito de cohecho, pero no en el de coacciones en relación a la denuncia del ‘excontroller’ José Antonio del Olmo, que ha enviado a un juzgado de Bilbao por no ser él competente. Además, anteriormente, también se habían sobreseído las caudas de Pablo Insunza, Francisco Martínez Córcoles y Fernando Bécker.

Y en paralelo, la Fiscalía Anticorrupción ha archivado la investigación sobre el contrato de compra de mascarillas del hermano de Isabel Díaz Ayuso. Parece que desde el Ministerio Público se está apostando por reducir la crispación en la justicia, y por tanto, también el uso de dicha justicia con fines partidistas, porque es algo que repercute tanto en el PSOE como en el PP, y el partido que lidera Pedro Sánchez ya acaba de recibir un gran palo en las elecciones andaluzas. Y normalmente si la Fiscalía archiva algún tema, el juez sigue su criterio. A lo mejor es que España se está serenando... o es que los políticos necesitan, todos, que se serene. Sobre todo PSOE y PP.