Allianz no logra remontar y a las elevadísimas provisiones que lastraron el resultado del primer trimestre se une ahora un mercado turbulento y volátil que afectó muy negativamente al negocio de la gestión de activos, cuyo Ebitda se redujo un 6,6%% en el segundo trimestre. Así, entre abril y junio, el beneficio del grupo cayó un 23,3% y no superó los 1.706 millones de euros, a pesar del crecimiento del 21,1% de los seguros de propiedad y accidentes, informó este viernes la compañía.

Al final, de enero a junio, la aseguradora alemana ganó 2.300 millones de euros, un 52,7% menos, aunque la buena noticia es que los ingresos aumentaron un 7,2%, hasta los 81.200 millones, y el Ebitda lo hizo un 1,2% y alcanzó los 6.700 millones.

La compañía “está bien posicionada para superar los efectos de la elevada inflación y de la presión económica, que se nota especialmente en Europa”, afirmó el Ceo, Oliver Bäte.

De momento, el segundo trimestre se le ha atragantado y las acciones en bolsa caen más de un 2% este viernes. Algo habrá que mejorar.