Alibaba ya no es lo que era hace años, pues su cotización se ha hundido un 76% desde octubre de 2020, cuando registraba máximos... pero el Partido Comunista Chino rompió con Jack Ma por sus críticas al gobierno, las políticas económicas y el sistema financiero del gigante asiático. Esto no gustó nada al Partido y derivó en la suspensión de la salida a bolsa de la fintech Ant Group, más exigencias regulatorias, la salida y ‘desaparición’ de Ma e incluso una multa antimonopolio.

El gigante chino de comercio electrónico se creó en junio de 1999, pero en los últimos años ha ido afrontando cada vez más dificultades, entre ellas, la marcha de Ma y la presión del partido que lidera Xi Jinping. Asimismo, también ha tenido que hacer frente al crecimiento de la competencia en el comercio electrónico mundial, sobre todo, desde que surgió la pandemia del Covid-19… que precisamente empezó en China: a las compañías que ya existían al entrar en el siglo XXI (entre ellas, las estadounidenses Amazon y eBay; la alemana Zalando; la japonesa Rakuten; y la china JD) se han unido otras grandes en el gigante asiático, como Shein y Temu.

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Alibaba no compite con sus propios vendedores, como sí hace Amazon, y se ha convertido en un gran conglomerado compuesto por 32 marcas: AliExpress, Cainiao (logística), Alibaba Cloud (el negocio de la nube), los supermercados Freshippo, Tmall (comercio electrónico de moda, tecnología y menaje), Taobao (mercado online) y la nueva plataforma Miravia, entre ellas. La pasada primavera, Alibaba anunció su apuesta por el ‘esquema Villalonga’ (el que puso en marcha Juan Villalonga cuando presidía Telefónica, bajo el principio infundado y muy anglosajón de que la suma de las partes vale más que el todo) con una escisión en seis empresas: Inteligencia en la Nube (las actividades de la nube, la inteligencia artificial y Ding Talk), Taobao Tmall Commerce (actividades comerciales en China), Servicios Locales (incluye la plataforma de navegación Amap y el servicio de entrega Ele.me), Cainiao Logística Inteligente, Comercio Digital Global (empresas de comercio internacional como Lazada, AliExpress, Trendyol, Daraz y Alibaba.com), y Entretenimiento y Medios Digitales.

El anuncio de la escisión en seis se hizo, curiosamente, días después de que Jack Ma reapareciera en China, en concreto en una escuela de Hangzhou, tras una breve parada en Hong Kong. Recuerden que a Ma le salieron muy caras sus críticas al Partido Comunista China porque no sólo tuvo que dejar la presidencia de Alibaba en septiembre de 2019, pasándose a la filantropía, sino que más tarde, en enero de 2023, también perdió el control de Ant Group. En todo ese tiempo, ha sido difícil verle en público: en enero de 2021, reapareció en un encuentro virtual tras meses ‘desaparecido’; dejó China a finales de 2021 y desde entonces se le ha visto en varios países (Japón, Australia, Tailandia y Uruguay, entre otros). A Ma le relevó Daniel Zhang (el inventor del famoso ‘Día del Soltero’) como presidente y CEO de Alibaba en septiembre de 2019, y en 2023 se le añadió la responsabilidad de ser primer ejecutivo de la compañía Inteligencia en la Nube. El pasado 10 de septiembre, Zhang dejó de ser presidente y CEO, cargos que en línea con el buen gobierno corporativo occidental recayeron en dos personas distintas y que ayudaron a Ma a fundar Alibaba: Eddie Yongming Wu, que presidía Taobao y Tmall, pasó a ocupar la silla de CEO; y Joseph C. Tsai, vicepresidente ejecutivo de Alibaba, ascendió a presidente. Dos meses después alteró su apuesta por el ‘esquema Villalonga’, pues decidió suspender la escisión del negocio en la nube que lidera Zhang por las nuevas restricciones que ha introducido EEUU a la exportación de microchips de última tecnología; y aparcó la salida a bolsa de su negocio de supermercados Freshippo por las condiciones del mercado (excusa que también han utilizado la energética española Naturgy y el fabricante automovilístico francés Renault para suspender alguna escisión).

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El gigante chino de comercio electrónico sigue plegado al Partido Comunista Chino y esto se vio muy bien hace unos meses, cuando la multa por culpa de su fintech Ant Group fue menor de la esperada (unos 899 millones, frente a los 1.000 millones que se barajaban). Asimismo, el Gobierno de Xi Jinping ha obligado a Ele.me, la empresa de entrega a domicilio de Alibaba, a rebajar las comisiones que cobra a los restaurantes. Su plantilla cerró el año 2023 con 219.260 trabajadores, pero vive una fuerte reducción en los últimos tiempos: en más de 40.000 personas en los últimos dos años, de las que 5.695 han sido en el último trimestre, cuando su beneficio neto se hundió un 69%… ante la mayor competencia de Shein y Temu. Entre octubre y diciembre (periodo que corresponde a su tercer trimestre fiscal), Alibaba ganó 1.887 millones de euros (-69%), pese a que las ventas ascendieron a 34.032 millones (+5%),… y su CEO, Eddie Wu, presumió de “un trimestre sólido”, aunque la prioridad es reavivar el crecimiento de sus negocios principales: el comercio electrónico y la computación en la nube.

Entre abril y diciembre, las ventas han crecido un 8,9%, a 94.024 millones, siendo Taobao (el negocio comercial en China) el mayor contribuidor, con 44.663 millones (+6%) y la plataforma comercial internacional la que registró el mayor aumento (+46%, a 9.823 millones). Por su parte, el beneficio neto se ha incrementado en un 56%, a 9.996 millones. Unos resultados que no gustaron demasiado a los accionistas (la cotización bajó un 6% y acumula una depreciación del 35% en el último año), a pesar de que la junta directiva aprobó una mayor recompra de acciones “que demuestra nuestra confianza en las perspectivas de nuestro negocio y flujo de caja”, según Toby Xu, director financiero de Alibaba. Y ojo, no olviden que hace unas semanas, Jack Ma y Joseph C. Tsai compraron acciones del gigante chino de comercio electrónico, superando la participación que tenía Softbank. ¡Muy curioso! ¿Casualidad? Como saben, no y más si uno recuerda al poeta, dramaturgo, filósofo e historiador alemán Friedrich Schiller, quien defendía que las casualidades no existen.