El sector aéreo no despega… para desgracia de AENA (y con ello, del Estado, dueño del 51%) y las aerolíneas, que han tenido pérdidas en el primer semestre. Y es que la pandemia del coronavirus sigue golpeando fuertemente a este sector, así como al hotelero, por sus efectos sobre el turismo: en los aeropuertos de la red de AENA se han registrado 50,46 millones de pasajeros entre enero y julio, lo que supone una caída del 68% respecto al mismo periodo de 2019.

En el séptimo mes del año, el tráfico ha sido de 6,99 millones de pasajeros, un 76,2% menos que hace un año, pero algo mejor que en junio, cuando hubo sólo 1,05 millones (-96,1%), debido a que se han relajado las restricciones. Eso sí, la aparición de numerosos rebrotes y la imposición de medidas (cuarentenas, tests PCR, recomendaciones de no viajar a España…) por parte de diversos países europeos podrían repercutir negativamente en las cifras de agosto.

El aeropuerto de Palma de Mallorca ha sido el que ha tenido el mayor número de pasajeros (posición que habitualmente ocupa el de Adolfo Suárez Madrid-Barajas), con 1,1 millones de pasajeros (-73,8%). Le han seguido el de la capital, con 990.899 (-83,3%) y el de Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, con 872.924 (-83,7%). En total, en julio, AENA ha registrado 118.467 operaciones (-50,8%), más del doble que los del mes anterior (43.640) y se transportaron 59.292 toneladas de mercancías (-32,9%).

AENA ha perdido 170,7 millones de euros en el primer semestre e importantes aerolíneas europeas (IAG, Air France-KLM, Ryanair y Lufthansa) acumulan pérdidas millonarias y podrían superar los 27.000 despidos. Las cifras de pasajeros de los siete primeros meses y los rebrotes no invitan al optimismo y será imposible repetir la cifra de tráfico del año pasado: 275,24 millones. La recuperación del sector aéreo tardará años y puede que no todos sus actores aguanten…