Este viernes, el Gobierno ha vuelto a presentar sus Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 -a ver si esta vez ya va la vencida-, en los que, cómo no, insiste en subir impuestos y gastos (que pagaremos todos)… porque en su opinión, ¡España va muy bien! Y es que el que el optimismo se ha impuesto en el equipo de Pedro Sánchez, pese a que la ministra de Economía, Nadia Calviño, haya insistido en el “principio de prudencia”. Pero la verdad es que habrá menor crecimiento económico y se crearán menos empleos (800.000 en dos años, en vez de 500.000 anuales). De hecho, a la rebaja de previsión del PIB hay que añadir la subida en la de la tasa de paro, del 13,8% al 14%. 

Una muestra clara del optimismo imperante se ha visto en los primeros minutos de la rueda de posterior al Consejo de Ministros: la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha afirmado que “el pesimismo es un territorio vacío”. Y algo más tarde, en su turno de intervención, la titular de Hacienda, María Jesús Montero, ha señalado “soy optimista”. Ahora empieza el trámite parlamentario de los PGE, donde habrá que contentar a muchos, sobre todo, a los separatistas catalanes. 

Ahora empieza el trámite parlamentario, donde habrá que contentar a muchos, sobre todo, a los separatistas catalanes 

En resumen, ¿qué recogen los Presupuestos? Más ingresos y gastos, y un “mayor ajuste fiscal”, en palabras de Calviño porque el PP no ha dado el visto bueno a su senda de déficit (1,3% del PIB), así que deberán cumplir la del Ejecutivo Rajoy (1,8%), pero existen dudas al respecto. Con subidas de impuestos, prevén obtener una recaudación récord de 227.356 millones de euros, aunque algunas estimaciones concretas han sido cuestionadas por diversos organismos meses atrás.

Esta cifra de recaudación se alcanzará por el “rumbo del ciclo económico y las nuevas medidas tributarias”, según Montero. Destacamos algunas partidas:

  • El Impuesto de Sociedades ingresará 27.579 millones (+14,1%) “por el alza para las grandes empresas (las que facturen más de 20 millones)”, cuyo tipo mínimo será del 15%, para las entidades de crédito y las empresas de hidrocarburos subirá al 18%, además, las socimis abonarán un gravamen del 15% sobre los beneficios no distribuidos y las empresas empezarán a tributar por dividendos y plusvalías de sus filiales.
  • Por IRPF se recaudarán 86.454 millones (+4,9%) “por el aumento de los salarios medios y las mayores aportaciones de las rentas altas”.
  • En IVA, se ingresarán 78.307 millones (+11,7%), aunque sólo bajará el de productos de higiene femenina (del 10% al 4%), servicios veterinarios (del 21% al 10%) y periódicos, libros y revistas digitales ( del 21 al 4%).
  • El impuesto al diésel será de 3,8 céntimos el litro.
  • Y el Impuesto de Patrimonio subirá un 1% para las fortunas superiores a los 10 millones.

El Gobierno espera recaudar 1.200 millones gracias a la ‘tasa Google’, pero quizás es demasiado optimista

En total, los ingresos tributarios ascenderán a 128.930 millones (+11,9%) y como saben, también incluirán las subidas de las cotizaciones sociales y nuevos impuestos que serán aprobados por el Consejo de Ministros de la próxima semana:

  • La famosa ‘tasa Google’, siendo España el primer país europeo en aplicarla. El Gobierno espera recaudar 1.200 millones, al gravar el 3% de los ingresos por publicidad online, plataformas de intermediación en línea entre usuarios y proveedores de productos y servicios, y venta de datos a partir de la información aportada por los usuarios a empresas que facturen más de 750 millones en todo el mundo y más de tres millones en España, pero quizás es demasiado optimista porque Austria ha abierto la puerta a poner en marcha su 'tasa Google' con un gravamen del 3% a aquellas compañías tecnologías que facturen más de 750 millones a nivel global y más de 10 millones en dicho país, recaudando 200 millones. 
  • El impuesto sobre transacciones financieras gravará el 0,2% de la compraventa de acciones de empresas cotizadas con capitalización superior a los 1.000 millones. La recaudación estimada es de 850 millones. 

Y en el capítulo de gastos también hay manga ancha porque suben: las pensiones, el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), los salarios de los funcionarios, la inversión (+14,6%, hasta los 16.947 millones, sin perder de vista que es año electoral, a ver cómo se reparte territorialmente... porque se espera que Cataluña sea favorecida), las becas, las ayudas de material escolar, etc. Además, se recupera el subsidio para los mayores de 52 años y se amplía la duración del permiso de paternidad.