Seguimos con nuestro análisis de los resultados de compañías del Ibex 35. En esta ocasión abordaremos la información del grupo Ferrovial. La cifra de ingresos del grupo constructor del primer semestre de 2020 ha sido superior en un 10,6 % a la cifra del mismo período del año anterior. Todo pinta bien, pero no se adelanten mis queridos lectores.

En lo que se refiere al resultado del grupo en el primer semestre de 2020 no traemos buenas noticias. Los resultados del primer semestre de 2020 de Ferrovial han sido negativos, inferiores en un 98,41% a los del mismo periodo de 2019. Así, el grupo constructor y de infraestructuras que preside Rafael del Pino ha publicado un resultado consolidado de -379 millones de euros (M€), frente a los -6 M€ de 2019 a igual fecha. De negativo a más negativo.

La crisis del Covid-19 y el gran confinamiento no parecen haber afectado a los ingresos como sí lo han hecho a sus beneficios: los primeros suben (+10,6%) y los segundos caen (-98,4%)

La crisis del Covid-19 y el gran confinamiento no parecen haber afectado a Ferrovial tanto a sus ingresos como sí vemos que lo han hecho a sus beneficios: al fin y al cabo los ingresos han aumentado y los beneficios se han reducido. Pero ya se sabe que una reducción en los ingresos se amplía fuertemente cuando llegamos a la última línea de la cuenta de resultados. El mayor impacto sufrido en el resultado del grupo deviene de la evolución de la partida de resultado neto de actividades discontinuadas, ya que en el primer semestre de 2019 se registró un resultado positivo de 137 M€ y en el mismo período del año 2020 esta cifra ha sido negativa en -59 M€. Sabiendo del mal resultado obtenido en esta cifra de operaciones discontinuadas, Ferrovial pretende tranquilizar a sus inversores reflejando en sus cuentas que su negocio de Servicios España ha obtenido un resultado positivo de 49 millones de euros es decir, Ferrovial gana dinero en España, pues muy interesante.

Una cuenta de resultados muy aburrida, como corresponde a un negocio muy consolidado de construcción y que traslada el incremento de los ingresos al resultado bruto de explotación (Ebitda y que el grupo constructor refiere como RBE). Este último aumenta en un 208,44% al cierre de junio de 2020, en comparación con el cierre de hace doce meses, desde los -118 M€ a 128 M€​.

Vayamos con el endeudamiento del grupo. A tenor del balance de Ferrovial, la deuda financiera del grupo, parte principal de su deuda, ha aumentado en el largo plazo desde los 7.565 M€ a cierre del ejercicio 2019 hasta los 9.030 M€, esto es un 16,2%, y en el corto plazo, en igual análisis comparativo, desde 1.033 M€ hasta los 1.478 M€, esto es un 30%. Ferrovial parece seguir el comportamiento de otras muchas compañías o grupos empresariales durante el último trimestre (en algunas ya al final del primero) de ampliación del pasivo no corriente para afrontar la crisis del Covid-19.

Finalmente, el flujo de caja consolidado del grupo sigue en un estado de negatividad perpetua, menos negativo en el primer semestre de 2020 que el de 2019 eso sí, pareciendo el día de la marmota de aquellos días cercanos y a tenor de las últimas noticias de prensa, lejanos, de cuando estábamos todos confinados. Cuando el grupo incluye en su flujo de caja las sociedades concesionarias, su cifra de flujo de caja se va al traste.

En cualquier caso, habrá que ver en el caso de Ferrovial cómo le afecta el peor comportamiento previsto de la pandemia Covid-19 en la economía en su conjunto a sus cuentas, esperemos que la cosa mejore, porque esto no pinta nada bien.