Samuel Vázquez publica un tuit sobre los menas, como católico y criminólogo... y el director de opinión de ABC le bloquea en sus redes sociales
El propio Samuel Vázquez lo publicaba en su twitter. El presidente de la Asociación Policía S.XXI subía un tuit para dar su opinión como católico respecto a un tuit en el que el director de opinión de ABC, Diego S. Garrocho, acusaba de xenofobia a Rocío Monasterio, portavoz de Vox en la Comunidad de Madrid.
Y este el tuit de Samuel Vázquez explicando que Garrocho le había bloqueado en su cuenta de Twitter.
Respecto al bloqueo del director de opinión de ABC a Vázquez, digamos que ahora lo entendemos todo y ahora entendemos también la línea editorial del periódico.
En cuanto a la propuesta de Vázquez de emplear tratamientos de disgregación individualizados con el retorno al ámbito familiar como primera opción, sólo dos observaciones:
- La primera: en el caso de los menas si se les retornara a su ámbito familiar, entendemos que estaríamos entrando en las devoluciones en caliente y, por un lado, si a esos menores se les devuelve a sus hogares pueden ocurrir dos cosas: que sus familias se desentiendan -por falta de recursos o porque consideren que podrán vivir mejor en otros países, como España- y que tampoco las autoridades se hagan cargo. Estaríamos hablando, por ejemplo, de gobiernos como el de Mohamed VI, el sátrapa que envía contra España a inmigrantes africanos desesperados, que se juegan la vida para entrar en la Unión Europea. Son balas humanas, personas utilizadas por Marruecos como misiles contra España.
- La segunda, si hablamos de familias, podríamos pensar en que esos menores fueran acogidos por familias en el país al que llegan. Pero, ¿cuántas familias están dispuestas a acoger a esos menas llegados de países en los que lo primero que aprenden puede ser a buscarse la vida o a defenderse utilizando las armas si es necesario?
En Hispanidad hemos apostado varias veces por la vía que propone el Papa: Francisco apuesta por la mejor solución: no hay que favorecer la emigración, sino ayudar a los pobres en su país de origen.
Y, si se le acoge, también exigirle que respete al país que le acoge. Si no, nada de acogida.
Y sí, hay que ayudar en origen, porque la emigración no es algo bueno: es malísimo: se entiende que emigra quien huye de la muerte y/o la miseria.