En 1993 el Papa Juan Pablo II visitó este lugar y lo dio a conocer al mundo entero
Hispanidad ha venido contando episodios de odio a la cruz o 'cruzfobia' en algunos lugares de la geografía española, como en Castellón, El Casar (Cáceres), Albacete, la Diputación de Cáceres, Baracaldo o San Vicente de Montalt (Barcelona).
Pues bien: ante todos estos episodios, resulta balsámico para los cristianos españoles que una de sus instituciones fundamentales, el Ejército, no tenga miedo a honrar el símbolo cristiano por antonomasia, la cruz, donde los cristianos creemos que murió Cristo para salvar a los hombres.
Y es que, al terminar su misión en Lituania el pasado 31 de agosto, los militares españoles no quisieron despedirse de su misión sin visitar la Colina de las Cruces, donde la Fuerza Aérea Española dejó allí una gran cruz con la bandera española en señal de su apoyo al pueblo lituano, informa Religión en Libertad.
La Fuerza Aérea Española abandonó el pasado 31 de agosto la misión de Policía Aérea en el Báltico (BAP) encomendada por la OTAN. Desde el 30 de abril pilotos españoles al mando de siete Eurofighter del Ala 14 vigilaron las fronteras bálticas ante posibles intrusiones rusas. Ahora han sido relevados por los F-16 de Dinamarca y Portugal, que pasan a liderar esta misión de alerta de reacción rápida,
La colina de las cruces está situada doce kilómetros al norte de la ciudad industrial de Siauliai y se ha convertido en el gran lugar de peregrinación del pueblo lituano. Desde hace siglos, la colocación de cruces en esta colina ha representado la resistencia pacífica de los católicos ante la opresión, añade Religión en Libertad.
Este ejemplo de resistencia se mostró de manera más clara durante la ocupación soviética y la represión del régimen comunista hacia los cristianos. Los comunistas no lograron que las cruces desaparecieran del lugar.
En 1993 el Papa Juan Pablo II visitó este lugar y lo dio a conocer al mundo entero. Quedó impresionado por esta enorme manifestación de fe y conmovido al hallar una gran cruz clavada en 1981, en plena dictadura, tras sufrir el atentado y que tenía inscrito: “Cristo ten piedad del Papa, Lituania te lo suplica de rodillas”, recuerda Religión en Libertad.