El Gobierno mexicano comunicó a principios de semana el hallazgo sin vida del cuerpo de Jesús Ociel Baena, magistrado de 38 años. Recibió el primer pasaporte no binario convirtiéndose en el primer mexicano en tener la X como género, representando el no binario. 

Se autodenominaba 'magistrade', siendo también la primera persona de género no binario en ocupar un cargo como jurista, y se abanderaba como referente y activista. 

El cadávez de Baena estaba junto al de su pareja, Dorian Herrera, en su casa de Aguascalientes en el centro de México. Pese a que la ministra de Seguridad de México, Rosa Icela Rodríguez, aseguró que estaban investigando la causa, pero que a primera vista no había indicios de la presencia de una tercera persona, los organizaciones LGBTI convocaron una movilización sin precedentes. 

Según informó la ministra los restos mostraban signos de haber sido víctimas de cuchillazos. En la misma línea, el fiscal general, Jesús Figueroa, aseguró que Dorian Herrera habría asesinado a Jesús y después se habría suicidado.

Aunque Rodríguez pidió "no adelantarse", y pese a las afirmaciones de Figueroa, las organizaciones LGBTI exigieron que se tildara como crimen de odio, informa Efe, llegando a organizar manifestaciones y protestas en más de 30 ciudades: "crimen pasional, mentira nacional".