Como ha informado Hispanidad, el pasado 1 de septiembre de 2021 entró en vigor la Ley Heartbeat -Latidos del Corazón’- en Texas, prohibiendo el aborto desde el momento en que se pueda detectar el latido fetal en el no nacido, algo que suele ocurrir en torno a la sexta semana de embarazo. Además, la ley permite a los ciudadanos privados demandar a quienes hayan realizado o «ayudado» a realizar un aborto en violación de la ley.

Varios meses después, la Comisión de Salud y Servicios Humanos ha publicado los datos relativos al aborto en el estado y los resultados son alentadores: el primer mes que la ley entró en vigor se practicaron un total de 2.197 abortos, lo que supone un 51% menos respecto del mismo mes de 2020. Según las cifras que maneja Heartbeat International son 24.246 las vidas que se han salvado gracias a la nueva ley en Texas, recogió Hispanidad.

Pues bien: el pasado viernes 11 de marzo la Corte Suprema de Texas puso fin a la última batalla legal contra la ley estatal ‘Latidos del Corazón’, dejando vigente una de las leyes provida más sólidas de la nación, recoge Aciprensa.

Los líderes provida elogiaron el fallo y lo calificaron como una gran victoria, en un caso presentado por los proveedores de servicios de aborto del estado.

“Esta es una gran victoria para los niños de Texas. La ley continuará protegiendo a los niños con un latido detectable de la violencia del aborto”, dijo en un comunicado Lila Rose, presidenta del grupo provida Live Action.

Esta es una gran victoria para los niños de Texas. La ley continuará protegiendo a los niños con un latido detectable de la violencia del aborto”, dijo en un comunicado Lila Rose, presidenta del grupo provida Live Action

Por el contrario, los opositores a la ley denunciaron el fallo como una mayor erosión del marco legal vigente desde la histórica decisión Roe vs. Wade de 1973 que legalizó el aborto en todo el país. En un tuit, el grupo American Civil Liberties Union (ACLU) calificó la decisión como “un golpe devastador para el derecho al aborto en Texas y en todo el país”, añade Aciprensa.

El caso se centró en la manera inusual en que los legisladores provida en Texas diseñaron la Ley de Latidos del Corazón para reducir drásticamente los abortos legales en el estado y aún resistir un desafío constitucional.

Roe prohíbe expresamente que los estados restrinjan el acceso de una mujer a un aborto antes de la etapa en la que un feto puede sobrevivir fuera del útero, que la Corte Suprema determinó entre las 24 y 28 semanas de embarazo.

La ley provida de Texas, que entró en vigencia el año pasado, prohíbe los abortos en una etapa mucho más temprana de la gestación: después de la detección de un latido cardíaco fetal, que generalmente ocurre alrededor de las seis semanas de embarazo.

Desde Roe, la Corte Suprema de Estados Unidos ha ordenado repetidamente a los funcionarios estatales que hagan cumplir tales restricciones. Lo que hace que la ley provida sea innovadora es que no otorga a los funcionarios estatales ningún poder de ejecución, explica Aciprensa.

En cambio, la ley de Texas deja su aplicación exclusivamente a los ciudadanos, quienes personalmente pueden presentar una demanda civil contra cualquier persona que intente procurar, realizar o “instigar” un aborto ilegal y recibir hasta 10.000 dólares en caso de violación, más los honorarios legales.

Whole Women's Health y otros proveedores de servicios de aborto de Texas argumentaron en su demanda que la ley podría anularse porque varios funcionarios estatales, incluidos el fiscal general, los jueces estatales y los secretarios judiciales, la hacen cumplir indirectamente al procesar y adjudicar estas demandas civiles.

Los líderes provida, por su parte, creen que la decisión de la Corte Suprema hará que más legislaturas estatales provida sigan el ejemplo de Texas, un proceso que ya está en marcha en Florida, Dakota del Sur, Ohio y un número creciente de otros estados.

“La Corte reconoció lo que ya sabíamos: esta ley es constitucional”, dijo el viernes Chelsey Youman, directora estatal de Texas y asesora legislativa nacional de Human Coalition Action, un grupo provida. “Es la legislación provida más exitosa en 50 años, y debe ser replicada en todas partes en los estados que se toman en serio el rescate de las vidas de los no nacidos”, agregó, recoge Aciprensa.