“Estamos en España, no estamos en Marruecos”, por lo que “cada vez que tengamos oportunidad vamos a denunciar el proceso de islamización que estamos sufriendo”. Son declaraciones de Manuel Gavira. En esta línea, el Portavoz del Grupo Parlamentario Vox en Andalucía ha anunciado que el partido ha registrado una Proposición No de Ley en la que reclamará a todos los grupos parlamentarios su apoyo para que en los espacios públicos de nuestra región, como colegios, universidades, parques u hospitales, “las mujeres no lleven ni velo islámico ni ninguna indumentaria islámica”.

Basta recordar el ejemplo de Parla donde se convocó una manifestación a favor del uso del velo islámico en las aulas con el añadido de reclamar: "¡Que prohíban la religión católica!".

Como ha indicado Gavira, sólo de una “manera integral” es posible “hacer frente a las consecuencias que provocan la inmigración ilegal y el proceso de islamización” que estamos sufriendo desde hace años en Andalucía y “al miedo, la intranquilidad y la inseguridad que los vecinos denuncian”.

Gavira, ha advertido, en referencia a los musulmanes, que “el día que nos superen en número estaremos acabados”, por eso “Vox lleva denunciando desde hace años el proceso de islamización de Europa, de España y de Andalucía, planificado con la promoción de la inmigración ilegal, financiado con las ayudas que reciben las ONG que colaboran con las mafias, y blanqueado por el Partido Popular y por el PSOE con esas regularizaciones masivas que están promoviendo y fomentando en el Congreso de los Diputados”.

En este sentido, el portavoz de Vox ha hecho un llamamiento para “acabar con las políticas de fronteras abiertas, con el efecto llamada y con las subvenciones que reciben las mafias y las falsas ONG”, así como también “con esas actividades paralelas del proceso de islamización” que se están produciendo en Andalucía, como es el caso del Programa de Lengua Árabe y Cultura Marroquí (PLACM) que se está impartiendo en cada vez más colegios andaluces, el “fomento del rito del cordero” o “el proceso de degradación de las mujeres en las religiones islámicas, culturas incompatibles con la nuestra”.

Precisamente, a este último aspecto responde la iniciativa registrada por Vox y anunciada este miércoles por Gavira, en la que Vox exige el apoyo del resto de grupos parlamentario para “prohibir el velo islámico; así como cualquier otro atuendo o vestimenta islámica, en todos los edificios y espacios públicos, abiertos y cerrados, por ser contrarios a los derechos fundamentales de las mujeres e incompatibles con nuestra identidad, cultura, usos, modos y costumbres” y declarar que estos “atentan contra los derechos fundamentales de las mujeres y son incompatibles con nuestra identidad, cultura, usos, modos y costumbres”.

Igualmente, se reclama “endurecer toda sanción dirigida a castigar las prácticas islámicas que atentan contra los derechos fundamentales y la dignidad de las mujeres, o que sean incompatibles con nuestra cultura; introduciendo sanciones y penas y procediendo a la suspensión de las solicitudes y trámites de obtención de la nacionalidad para todo aquel que obligue de forma opresiva a cualquier mujer o niña a vestir cualquier atuendo o vestimenta islámica”, así como “garantizar la igualdad entre hombres y mujeres, la integración cultural y el respeto por las tradiciones, cultura, idiosincrasia y valores propios de España, garantizando la adaptación plena de todas las personas a los modos de vida propiamente nacionales”.

Ojo, porque esta reivindicación no es exclusiva de Vox. Junts per Catalunya planteó recientemente una propuesta para vetar el uso del niqab y otras prendas que oculten el rostro en espacios públicos, alegando razones de seguridad, convivencia y neutralidad institucional. 

Pero, volviendo a la iniciativa de Vox, antes de la comparecencia de prensa para explicarla -en la cual también participó el portavoz de Inmigración y Seguridad de la formación, Samuel Vázquez- , y que ha tenido lugar “en la vía pública” frente al Consulado de Marruecos en Algeciras, el cónsul marroquí salió para preguntar si Vox tenía autorización para hablar en la calle y en nuestro propio país. Manuel Gavira aseguró que “estamos en España, no estamos en Marruecos, y nos vamos a plantar aquí cada vez que tengamos oportunidad a denunciar el proceso de islamización que estamos sufriendo”.

 

 

“Esto es Andalucía y esto es España, y vamos a pelear por cada centímetro cuadrado de nuestra nación. No les tenemos miedo ninguno y ni nos van a callar ni a silenciar, porque estamos en España y esta es nuestra patria y nuestra Nación".