Asegura Unicef (ver documento adjunto) que para el 40% de los niños españoles el Covid supone la principal preocupación. Estoy seguro de que es cierto y hasta me parece poco. Con la histeria que corre por el mundo, histeria global planetaria, telúrica, no me extraña que los menores se contagien de la neurosis de sus mayores. Aquí y en Beijing.

Muestras del desequilibrio mental de la actual generación por mor del Covid: una madre retira a su hijo asmático la mascarilla en un avión y la tripulación le exige que se ponga el bozal. Oiga, es que mi hijo se está ahogando. Que se la ponga. Que no. Al final, el avión regresa a su punto de partida y supongo que a la madre rebelde le pasarán las costes. Le está bien empleado, por negacionista.

En España, la Junta de Extremadura ha prohibido a dos niñas entrar en el colegio sin mascarilla. Todavía no las han fusilado pero están adoptando medidas… con muchas seriedad. Por ejemplo; segregarles como leprosos o darles clase a distancia, no vaya a ser que se mezclen con otras niñas obedientes a la autoridad y les peguen cualquier virus libertario.

En Baleares amenazan a los padres que llevaron a su hijo al colegio sin mascarilla, y a los que no permitieron entrar, con acusarles de absentismo, uno de los elementos para quitarles la patria potestad. O sea, para robarles a sus hijos.

Hay histeria y hay venganza. También en Baleares, un lugar donde pasa de todo desde que la socialista Francina lleva las riendas, durante el penoso confinamiento, un hombre grabó a los agentes policiales que interrumpieron en su domicilio, Pues bien, el Estado le llevó a los tribunales y ahora ha sido condenado a penas de prisión. Ya saben: no hay que dejar cabos sueltos.

A ver si va a resultar que los que hablaban de tiranía sanitaria no exageraban

Nuevo avance científico: en Israel descubren que tres dosis de Pfizer son más efectivas que dos

¡Que horror!, acabo de darme cuenta de que he incurrido en negacionismo manifiesto. En cualquier caso, tenemos suerte, la neurosis que nos azota no es cosa de los españoles: es global.  

¡Qué alivio!

Mientras, continúa la metamorfosis de la lucha contra el Covid en dictadura sanitaria. Se trata de una tiranía eficacísima. Con decirles que el poder no la impone a los ciudadanos: son los propios ciudadanos los que se la imponen a sí mismos.

Nuevo avance científico: en Israel descubren que tres dosis de Pfizer son más efectivas que dos. El próximo avance científico está a punto de caer: cuatro dosis, pongamos de Pfizer, son más eficaces que tres.

Naturalmente, Carolina Darias ya ha lanzado la tercera dosis en España

Dicho y hecho: Carolina Darias, ministro de Sanidad, nuestra esperanza de futuro, ya ha lanzado la tercera dosis, empezando por residencias. y con animo de generalización, Ademas, no se preocupan, cuando la tercera este mediada, llegará la cuarta. Y la quina, y la sexta... Ninguna será definitiva, ninguna curará pero, en todo caso, todas aumentarán la eficacia. Uno diría que más que neutralizar el virus lo que pretenden es ahogarlo. 

Y Pfizer cotiza en bolsa.