¿Recuerdan la reunión en la cumbre en Alcorcón? El delegado de Gobierno de la Comunidad de Madrid, Francisco Martín, antiguo colaborador de Pedro Sánchez en Moncloa, quien seguro les suena por ese gran momento en el que, sin despeinarse, dijo aquello de que, contra el Covid, los de Bildu habían hecho más que la derecha española. O por sus ataques constantes contra el rezo del Rosario en Ferraz o, por sus continuos enfrentamientos contra Ayuso. Martín se reunía con la Alcaldesa socialista del democrático Gobierno de Alcorcón formado por un tripartito de PSOE, Ganar Alcorcón -marca local de Sumar- y Más Madrid, Candelaria Testa.

La Delegación del Gobierno hablaba de "abordar la situación en la calle Praga. Se han planteado nuevas medidas de coordinación frente a los problemas de convivencia detectados en la zona". El Ayuntamiento por su lado comunicaba colaboración "para solucionar la problemática existente en los edificios de la calle Praga".

Ambos dos, Martín y Testa, ambos socialistas, hablaban de problemas de convivencia y evitaban poner nombre real al problema: okupas. En esta calle, y en tantas otras de Alcorcón, hay un grave problema con las okupaciones que causan incontables incidencias a los vecinos, pero claro, según el 'gran jefe' Sánchez la okupación es un bulo, así que no pueden hablar del asunto.

¿Consecuencia? Los okupas siguen haciendo de las suyas y eso justo denuncian los vecinos en el programa de 'En Boca de Todos' y en 'Vamos a ver'. Carmen y Josep, vecinos de Alcorcón, cuentan detalladamente todo lo que ocurre y expresan el temor con el que viven con las continuas peleas. 

'Es insoportable, no, es peligroso. Ya sean las 3:00h de la mañana a las 15:00h de la tarde, te da miedo salir a comprar, a por la niña al colegio, a cualquier cosa, porque no sabes lo que te vas a encontrar. Aquí se han metido en un local, no es un piso. Se ha metido mucha gente de todo tipo de razas y de todo, de todos los colores, y esto ya es insoportable''.

''La policía suele pasar más a menudo ahora desde que hemos denunciado el caso. La policía viene a lo mejor les pide la documentación y se vuelven a meter. Tiran piedras, arrancan adoquines, los tiran, insoportable. Esto se ha vuelto ya peligroso, la verdad''.

''Delincuencia máxima. O sea, aquí hay un peligro. Estamos aterrorizados. Mi marido me deja aquí en la puerta de casa para dejar el coche en el garaje porque me da pánico. Pero es que luego hasta que no sube no respiro. Ya se ha salido de madre y ya empiezan a ocupar cosas. Están por todos los lados'', denuncia Carmen. 

Por su parte Josep explica los constantes robos que sufre en su local por estos okupas: ''Es bastante complicado ya que la seguridad para empezar, tanto por los vecinos como por la gente que puede pasar por el barrio, con la situación que tenemos hoy, la misma hostelería mía se ha visto afectada. Me robaron una bicicleta que tenía expuesta en la parte externa con la que hacía delivery hace menos de cuatro o cinco días. Me robaron una máquina pequeña de bolas de chicles que la tenía dentro del local en pleno funcionamiento. La gente no quiere entrar por aquí porque claro, ves cada cara, cada gente parada a menos de una calle del restaurante''.

 

Peleas, insultos, robos, inseguridad que llevan atemorizando a los vecinos desde hace 9 años. Y ojo, muchos de los pisos okupados son propiedad de la Sareb.