Gran expectación ante la comparecencia del presidente del Consejo de Estado, Francisco Rubio Llorente en el selecto Foro Nueva Economía, celebrado en la mañana del miércoles 9 en el Hotel Palace de Madrid. Estaban presentes todos los consejeros y también el ministro de Justicia, Juan Francisco López Aguilar, que, por cierto, charlaba amigablemente con el jurista Miguel Herrero de Miñón.

Rubio Llorente desgranó las reformas constitucionales  a las que el Gobierno ha pedido consejo y señaló a Hispanidad.com que, en su opinión, dichas reformas exigen la disolución de las Cortes. En pureza, sólo exigiría la disolución de las Cortes el asunto de la sucesión a la Jefatura del Estado, pero Rubio Llorente considera que la reforma propuesta es un todo sobre el que no alberga ninguna duda que exige la disolución de Cortes. Está por ver si el Gobierno Zapatero está dispuesto a arriesgar el sillón presidencial. Claro que siempre puede ningunear la recomendación del Consejo de Estado, como en el informe referente al matrimonio homosexual.

Rubio Llorente no se muestra especialmente descontento por este ninguneo. Afirma que es una muestra de la independencia del Consejo y reconoce a Hispanidad.com que se muestra gratificado cuando en las críticas al Ejecutivo se invoca al Consejo de Estado como referente.