Iba de blanco vestida,

mantilla no portaba,

pensaba seguramente,

que era prenda trasnochada.

La tradición ya no cuenta,

que hay que ser urbana,

y dejar de ser cortesana.

¡Ay mi niña, que de blanco va!,

que es tradición ir de blanco,

cuando a un Papa visita,

de las Españas su Reina;

y cubierta la cabeza,

con mantilla blanca,

privilegio de una reina,

por ser católica ella.

Y si ésta prenda por antigua,

parece trasnochada,

¡que decir de la monarquía,

que en España es milenaria!

Y las tradiciones, o se conservan,

se guardan, y se aprecian,

o no se merece ser,

de las Españas su Reina.

 

J. R. Pablos