Sr. Director:
Este último fin de semana de marzo ha sido marcado en España -también en otros países de América y Europa- por el clamor del pueblo en defensa de la vida, primer derecho que la madre naturaleza reconoce a todo ser humano llamado a vivir.

 

Nadie honradamente puede negar hoy la evidencia científica de que la vida humana nace en el momento de la fecundación del óvulo. Hay ocasiones en las que se mata a un bebé que -con diferencia de unas pocas horas- se considera asesinato o no dependiendo de haberlo ejecutado "fuera o dentro" de su madre.

Por ello -sin menoscabo de exigir al Gobierno que salga de las próximas elecciones generales la anulación del despropósito llamado "derecho al aborto"- hay que adecuar la ley humana al avance de la ciencia, otorgando el reconocimiento  como ser humano desde el momento de su concepción, y su derecho a ser  inscrito en el Registro Civil con la presentación del oportuno certificado médico, como hoy se hace con los bebés ya alumbrados. Tal reconocimiento equiparará la protección del bebé en gestación con la del ya nacido.

Amparo Tos Boix