El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, atribuyó ayer a "un fallo en una reseña" que aparezcan sin citar en su libro párrafos de la conferencia de un diplomático español, y aseguró que serán subsanados en una edición posterior. Sánchez rechazó que este asunto siembre dudas sobre su tesis doctoral. En la rueda de prensa en Salzburgo, el presidente español se mostró dispuesto a comparecer en el Senado. "Si el Partido Popular quiere que comparezca en el Senado, lo haré, pero advierto: hacer oposición no es hacer ruido", señaló.
Por otra parte, los expresidentes del Gobierno Felipe González y José María Aznar reivindicaron la vigencia de la Constitución durante un debate organizado por EL PAÍS y la Cadena SER. González aseguró que sigue "activa" y dijo que los problemas actuales "no son por problemas constitucionales, sino por acción política", como el reto de los independentistas, la crisis económica, la inmigración o el Brexit. Por su parte, Aznar defendió que "el régimen del 78, con sus imperfecciones" es "lo mejor" que le ha pasado a España en su historia reciente.
Argelia Queralt (SER): “¿Para cuándo un debate político profundo y abierto sobre las necesidades de cambio de nuestra norma Fundamental?”
En la SER, Argelia Queralt afirmaba: “Asistimos esta semana a la política con minúsculas, esa que no arregla problemas, sino que los crea, que embrutece el debate público. La semana pasada se decidía exhumar a Franco del Valle de los Caídos y casi ni nos enteramos pese a que era un hito inédito en la dignificación de nuestra memoria democrática. También se convalidaba un Decreto Ley que introducía medidas importantísimas para la lucha contra la violencia de género. Pero todo aquello quedó tapado por la piedra envenenada que lanzó Rivera sobre la tesis del presidente Sánchez. Hoy todavía seguimos en ese lodo. Esta semana el Gobierno, seguramente para cambiar el ritmo del debate, anunciaba, ni más ni menos, que una reforma constitucional. Pero una reforma absolutamente secundaria –ya que pueden eliminarse miles de aforamientos modificando leyes- y sin debate previo. Entonces ¿por qué acometer esta reforma y no otras acuciantes para nuestro sistema político como es la organización territorial? ¿Para cuándo un debate político profundo y abierto sobre las necesidades de cambio de nuestra norma Fundamental? Me temo que tardaremos en verlo. Unos y otros se colocan en los puestos de salida de una nueva carrera electoral. Como decía aquel: Más madera, ¡qué es la guerra!".
Isabel Benjumea (SER): “Lo primero es que la Constitución hay que cumplirla y si no se cumple, hay consecuencias”
En la SER, Isabel Benjumea: “Abrir el debate de la reforma constitucional cuando lo que tenemos ahora mismo es un reto inmenso en una región de España como es Cataluña y en otras están expectantes a ver lo que ocurre en Cataluña, me parece que lo primero es que la Constitución hay que cumplirla y si no se cumple, hay consecuencias”. “Luego se puede debatir si se puede reformar o no, por supuesto. Yo si fuera de Navarra, por ejemplo, querría reformar la Constitución”. “Claro que se puede reformar, pero hay que hacerlo de una manera seria, una reunión profunda y tiene que haber también mayorías suficientes, eso es muy importante”.
Jesús Maraña (SER): “Cuando se dice que no interesa ahora abrir ese debate (sobre la reforma constitucional), es que ya está abierto”
Jesús Maraña: “Se ha instalado que ahora mismo es imposible abordar una reforma a fondo de la Constitución porque hemos pasado del bipartidismo al cuatripartidismo, porque el Parlamento está muy fragmentado, porque tenemos el problema territorial incendiado especialmente en Cataluña. Pero Felipe González, haciendo historia, dijo que la situación en el 77 ó 78 era extraordinariamente complicada. Y había una fragmentación de partidos impresionante, y había gente que venía del exilio, de la dictadura, de las cárceles y gente que venía del régimen franquista. Había mucho que discutir y muy pocas posibilidades de ponerse de acuerdo. Lo que había era incentivos para hacer más importantes los acuerdos que los desacuerdos. Y tiene que ser desde la lealtad”. “Cuando se dice que no interesa ahora abrir ese debate, es que ya está abierto”.
Pablo Simón (SER): “A veces corremos el riesgo de comparar el contexto del 77 con el actual y nada puede ser más distinto”
Pablo Simón: “A veces corremos el riesgo de comparar el contexto del 77 con el actual y nada puede ser más distinto, por una razón muy sencilla: lo que se estaba era encendiendo el sistema operativo, estábamos arrancando el modelo y había tres objetivos claros como país: democracia consolidada, Europa y Estado del bienestar. Y eran tres pilares sobre los cuales más o menos podía haber acuerdos”. “Y fijaos en una cosa: la Constitución se caracteriza por ser muy flexible. Tiene la propiedad privada y que toda la riqueza está subordinada al interés general; la unidad de España pero el derecho de las nacionalidades y repone a ser autónoma. Era pura potencia. Ahora han pasado 40 años en los que esa potencia se ha convertido en acto y hay que ver los recovecos que hay que pulir”.
Carlos Alsina (Onda Cero): "Las preguntas sobre el fallo en el libro de Sánchez suponen una tortura para él"
En Onda Cero, Carlos Alsina comentaba: "Entonces, ¿habrá elecciones antes de fin de año o no las habrá? Pues si de cómo le vaya a Sánchez con su tesis doctoral depende, imposible saberlo. El caso lo dio por cerrado la Moncloa dos días después de abrirse pero ya se ha visto que se precipitó llevada de su optimismo antropológico, que diría Zapatero. El PP quiere exprimir el asunto en el Senado, con su mayoría absoluta metiéndole presión al presidente, y aun a riesgo de que el intento de acorralar a Sánchez por su tesis se le vuelva en contra a Casado y acabe siendo él acorralado por su máster. Petición de pleno monográfico va a haber y, si Sánchez cumple con lo que dijo ayer, allí estará el presidente para defenderse. Si quieren un pleno, perfecto. Ya solo falta que la Moncloa despeje la agenda del presidente y ofrezca fecha. Para hablar de tesis, de sospechas y de libros donde aparecen textos de la conferencia de un diplomático sin citarle. El fallo, así lo llama el presidente. Fallo porque se le olvidó ponerle las comillas al texto que no era suyo (ni suyo ni de Ocaña) y porque olvidaron también atribuirle lo reproducido a su autor verdadero. Las respuestas brevísimas, a disgusto, que dio Sánchez a las pocas preguntas que pudieron hacérsele sobre el tema dan cuenta de hasta qué punto el gobierno suspira por acabar cuanto antes con este martilleo que es, para él, una tortura".
Antonio Jiménez (COPE): “Hay demasiadas evidencias como para pensar que se ha hecho un trabajo honesto”
En la COPE, Antonio Jiménez destacaba: “Las cosas a veces son lo que parecen. Y va a ser difícil que Pedro Sánchez pueda explicar algo que no sea admitir que o él o en compañía de otros hizo una tesis que tiene muchas copias”, “sin citas”. “Y luego hay un dato: él hace su curso de doctorado en la Complutense, sin embargo, inmediatamente se pasa a la Camilo José Cela para hacer su tesis doctoral. En la Complutense hubiera tenido más dificultad para hacer esto, lógicamente. Y se encuentra en una universidad que probablemente, en ese momento, necesitaba también doctorandos y se iba a encontrar más facilidades. Y ahora atendrá que dar explicaciones de todo esto, si es que es inevitable”. “Hay demasiadas evidencias como para pensar que se ha hecho un trabajo honesto”.
Nicolás Redondo (COPE): “Podemos va a jugar un doble juego: de erosión permanente del gobierno, sin llevar al Gobierno a que convoque elecciones”
Nicolás Redondo señalaba: “Interesa la reacción -porque tiene calado político- de Pablo Iglesias. Creo que la relación entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias es la de un matrimonio de conveniencia. Es decir, Pedro Sánchez nos necesita para los votos de la moción de censura y Pablo Iglesias necesita que Sánchez esté en el Gobierno para recuperarse después de una caída bastante abrupta de sus expectativas electorales. La erosión al Gobierno no solo va a venir del PP y de Cs, sino de sus propias filas, de Podemos, que va a jugar -y ya está jugando- con el aforamiento del rey, con la tesis y con el libro llamándolo cutre, un doble juego: de erosión permanente del gobierno, sin llevar al Gobierno a que convoque elecciones”.