El juicio al 'procés' quedó ayer visto para sentencia. El alto tribunal tendrá que determinar, en caso de condena, si lo que ocurrió en Cataluña fue rebelión o sedición. La Fiscalía pide penas de entre 16 y 25 años por rebelión y la Abogacía del Estado, de 8 a 12 por sedición. Mientras que las defensas admiten desobediencia pero ni rebelión ni sedición. Los acusados, por su parte, realizaron un último alegato político, como si lo que se juzgara fueran actuaciones políticas y no hechos supuestamente delictivos.
Fernando Ónega (Onda Cero): “Torra está trabajando en aprovechar la sentencia del procés para hacer una nueva rebelión”
En Onda Cero, Fernando Ónega apuntaba: “Si te digo mi verdad, no acierto a encontrar grandes cambios entre el comienzo del juicio y el final. Hemos descubierto a un gran juez, Marchena, que supo combinar flexibilidad y rigor.
Me sorprendió el abogado Melero, cuando confesó en Más de uno que el juicio había sido ejemplar y con garantías plenas. En lo demás, los fiscales hicieron el relato que se podía esperar y las defensas, el que se podía suponer. Los procesados, un alegato político con muchas exculpaciones, pero con propósito declarado de volverlo a hacer. Su falta de arrepentimiento no creo que les ayude en la sentencia.
En el fondo, el juicio ha sido la versión togada del debate que hay en la sociedad: unos ven insurrección, otros ven ejercicio de derechos cívicos. Unos, gran violencia; otros, episodios de orden público.
Y sobrevolándolo todo, la presión sobre los jueces, con esa desfachatez tan de Torra de calificar como farsa uno de los juicios celebrados con más rigor, paciencia, aportación de pruebas, libertad de defensa e incluso pedagogía. Los argumentos políticos son siempre atendibles y quizá sean, efectivamente, la solución, pero el Tribunal Supremo no es el lugar para dirimirlos.
Y ahora empieza la parte sustancial: la redacción de la sentencia. Sea blanda o sea dura, que nadie espere de ella efectos balsámicos. Torra ya está trabajando en aprovecharla para hacer una nueva rebelión. Que no lo será en sus términos jurídicos, pero lo será en sus consecuencias: la política y la social".
Carlos Alsina (Onda Cero): “Abogados defensores y procesados martilleándole al tribunal una misma idea: si sentencia que hubo rebelión, o sedición, será culpable de que la situación en Cataluña empeore”
En Onda Cero, Carlos Alsina comentaba: “En el Supremo, visto para sentencia el juicio por rebelión con abogados defensores y procesados martilleándole al tribunal una misma idea: si sentencia que hubo rebelión, o sedición, será culpable de que la situación en Cataluña empeore. Pero si opta por dejarlo sólo en desobediencia al Constitucional, entonces contribuirá, qué estupendo, a la paz social, la concordia y el hermoso entendimiento democrático.
Pelillos a la mar, magistrados, pasen página de este obstáculo imprevisto en la revolución de las sonrisas y háganse querer por el coro independentista proclamando que Junqueras y compañía sólo cometieron un error de cálculo político. Pelillos a la mar y Rufián dejará de decir que todos los jueces del Supremo son franquistas.
En su alegato final dijo Junqueras (el coautor, con Puigdemont, de la hoja de ruta que condujo al primero de octubre y la proclamación de la independencia) que el tribunal ha de devolver la cuestión catalana al terreno de la política. De la buena política”.
(…)
“Éste era el mensaje de fondo: piensen en términos políticos y hagan una sentencia política. Extraordinaria paradoja en boca de quienes se han cansado de denunciar que éste era un juicio político”.
Rubén Amón (Onda Cero): “Los encausados en el juicio del procés descalifican el Estado y prometen reincidir. ¿Puede decirse que han perdido el juicio?”
En Onda Cero, Rubén Amón se preguntaba: “Los encausados en el juicio del procés descalifican el Estado y prometen reincidir. ¿Puede decirse que han perdido el juicio?
Junqueras dice en su alegato que ahora es el tiempo de la política. ¿No es exactamente al revés, o sea, no es ahora el tiempo de la justicia?
¿Ha reaparecido el fantasma de Frankenstein en el cabecero de Pedro Sánchez? Mucha atención que, a día de hoy, la investidura depende de la abstención de Esquerra y de Bildu. Que de lo único que se abstienen es de España.
¿No os parece que de tanto pactar con el PP y Vox, Albert Rivera va a terminar por felicitar la Navidad con la foto de la plaza de Colón?
¿Y no es insólito que la aprobación de los presupuestos de Andalucía haya dependido de la política autonómica y municipal madrileña? Vox levanta el veto en Sevilla porque la derechita cobarde ha decidido poner la cama redonda.
De González a Zapatero, de Zapatero a Sánchez. De Aznar a Rajoy, de Rajoy a Casado. ¿No debería plantearse las Edades del Hombre un exposición sobre el proceso regresivo de la política española? Os pongo otro ejemplo: de Pujol a Maragall, de Maragall a Montilla, de Montilla a Mas, de Mas a Puigdemont, de Puigdemont a Torra.
¿Es verdad que Felipe VI va a hacerse abonado de Las Ventas? Ayer presidió la corrida de la Beneficencia y recibió más vivas, ovaciones y expresiones de pasión monárquica que en cinco años de reinado”.
Xavier Vidal-Folch (SER): “La salida del embrollo, si es que la hay, vendrá con la sentencia, en otoño”
En la SER, Xavier Vidal-Folch comentaba: “‘Visto para sentencia’, dictaminó ayer el magistrado Manuel Marchena. Y parecía un momento de esos que llaman históricos. La vista oral del juicio sobre el “procés” concluyó ayer con unos encendidos alegatos sobre el intento de desmochar la Constitución y el Estatut. Solo uno, Jordi Cuixart, aseguró con énfasis que lo repetiría exactamente la experiencia. La mayoría se entregó a la complacencia: teníamos razón, votar es legal, la gente estaba ilusionada. Y hubo uno, el que desplegó más coraje, autocrítico: Santi Vila, el consejero que dimitió antes que hacer el ridículo con una declaración de independencia de pandereta.
Lamentó Vila que todo el procés hubiera acabado en “el despropósito” en que acabó. Y animó a todos a buscar la manera de reenderezar las cosas. Otros se mantenían favorables a lo que hicieron. Y solo uno, Jordi Cuixart, aseguró que volvería a hacerlo.
Cuatro meses de juicio oral. Una discusión muy caliente sobre si hubo o no violencia, y cuánta. Peticiones de cárcel más que cuantiosas. La salida del embrollo, si es que la hay, vendrá con la sentencia, en otoño”.
José María Izquierdo (SER): “No es poca cosa que un juicio tan importante haya merecido este tratamiento, decisión que debe tener el reconocimiento de toda la ciudadanía”
En la SER, José María Izquierdo afirmaba: “Hoy sí que el juicio a Oriol Junqueras y compañía ya está visto para sentencia, así que vamos a tomarnos una jornada de respiro en esa guerra -más sucia que ejemplar- de los pactos para el gobierno de la nación, las comunidades autónomas y los ayuntamientos. El fin de esta larga y prolija vista oral que comenzó el 12 de febrero, significa que ya estamos todos en manos de Manuel Marchena y los magistrados de la Sala Segunda del Tribunal Supremo. Lo primero será destacar la absoluta transparencia de la vista, televisadas todas sus sesiones en directo. No es poca cosa que un juicio tan importante haya merecido este tratamiento, decisión que debe tener el reconocimiento de toda la ciudadanía. Acusados, abogados, fiscales, testigos y hasta los jueces han tenido la oportunidad de dirigirse no solo a la Sala, sino a todos los españoles, de Cataluña, desde luego, pero también de Madrid o Sevilla. Un lujo democrático. Tras las alegaciones de las defensas, cerraron la vista los acusados, Oriol Junqueras el último, que optaron por transformar sus intervenciones en claros alegatos políticos. Poco sentido tiene elucubrar desde el Ojo sobre sedición o rebelión y otras oscuridades técnicas. Bastará con lamentar, una vez más, que el conflicto haya llegado, por la ineptitud de unos y otros, al pantano de la justicia, que nada solucionará. Ahora, ajo y agua”.
Pilar García de la Granja (COPE): “Los acusados no son conscientes de que por mucho que ellos consideren acciones políticas, la justicia sigue su curso"
En la COPE, Pilar García de la Granja decía: “Me parece que los acusados defienden genuinamente una acción política porque, quizá sea una estrategia o una realidad, quieren confundir la política con la justicia y no son conscientes de que por mucho que ellos consideren acciones políticas, la justicia sigue su curso y su paso y si consideran que se cometen delitos la intención puede ser un eximente pero desde luego nunca un exculpan”.
José María Fidalgo (COPE): “Parece que en este caso los defensores nos quieren dar lecciones de cultura general a los españoles. A mí esto me estomaga”
José María Fidalgo comentaba: “Cuando hoy he leído la prensa y he visto tanta cita de Faulkner a Hannah Arendt es que parece que en este caso los defensores nos quieren dar lecciones de cultura general a los españoles. A mí esto me estomaga. Las alusiones a la literatura mundial”. “Supongo que en Cataluña Faulkner será leído por un grupo de gente como la que está aquí, Hannah Arendt más vale que no la lean porque evidentemente habló muy claro de lo que era el totalitarismo y de dónde salía”. “La sensación que tengo es de unos pobres intelectuales desde el punto de vista de solvencia intentando adoctrinarnos como en una escuela de paletos”.
Salvador Sostres (COPE): “Si yo fuera independentista sería el primero que desearía que toda esta gente se pasar muchos años en la cárcel”
Salvador Sostres apuntaba: “No puedes estafar a la gente diciendo que estás intentando la independencia cuando tú sabes que no tiene ningún recorrido porque tú eres el primero que no has preparado. No puedes tampoco hacer ver luego en el juicio que no has hecho nada porque es una doble estafa, una estafa a tu gente, a la gente que incluso ha sido valiente en algún momento para ponerse en algún tipo de riesgo para seguir lo que tú les decías y luego no solo dejarles tirados sino avergonzarles y decir en un juicio que no has hecho nada, que aquello era solo una declaración política o incluso una farsa como llegó decir el magnífico abogado Javier Melero de Forn. Si yo fuera independentista sería el primero que desearía que toda esta gente se pasar muchos años en la cárcel”.
Santi González (COPE): “Fin del juicio del procés: ‘Visto para sentencia’”
Santi González comentaba en COPE: “Eran las siete y dos minutos de la tarde cuando Manuel Marchena pronunció las palabras rituales: “Visto para sentencia” para pedir a continuación a todos los presentes que desalojaran la sala. Antes habían desfilado uno, por uno, los doce procesados para exponer sus alegatos finales y antes aún sus defensas para hacer sus respectivos informes.
Cualquier observador medianamente atento coincidiría con la apreciación dejada en Twitter por José María de Pablo, que es abogado penalista y ejerce como tal en el bufete Mas y Calvet: “el derecho a la última palabra, amigos, es una trampa del legislador para que el acusado eche por tierra el esfuerzo de su abogado. Y hay quien sigue cayendo”.
Es un resumen muy atinado de la realidad. Las defensas coincidieron en argumentar que “el mío no ha hecho nada”, idea que repitieron con mucha convicción los procesados: “No hemos hecho nada, pero lo volveremos a hacer”. Entre las curiosidades de la última jornada hay que destacar la presencia en la sala de Quim Torra Plá y el cierre del Parlamento de Cataluña decidido por esa criatura de Lombroso que es Roger Torrent, que al decir de Rosa Belmonte , cuelga de vez en cuando el cartel ‘vuelvo en cinco minutos’ en la cámara que preside.
Hubo sentimentalismo y cursilería y algunas lágrimas de Turull. Y también algunas amenazas como veníamos diciendo. Nos hizo temer lo peor Jordi Sánchez que empezó su intervención remontándose atrás 25 siglos para citar a Sócrates. Y después a Hannah Arendt, que qué tendrá que ver. También tuvo su punto la gran consentidora del golpe desde la presidencia del parlament, Carme Forcadell, se quejó de que a ella la habían sentado en el banquillo por ser quien era. Quiso su mala fortuna que su última palabra coincidiera con la negación del Tribunal de Estrasburgo a considerar que el Supremo hubiera abusado de la prisión provisional en su caso. Está bien donde está, como todos ellos".