El Senado italiano ha rechazado el "Certificado Europeo de Paternidad" propuesto por la Comisión Europea para que todos los países de la UE reconozcan automáticamente la paternidad establecida y legal en otro Estado miembro, incluida la de familias LGTBQ.

La propuesta de Bruselas fue desestimada por la Comisión de Políticas Europeas del Senado Italiano con once votos en contra y siete a favor, la resolución considera que "algunas de las disposiciones contenidas" no respetan "los principios de subsidiariedad y proporcionalidad", por lo que, de aprobarse, "supondría una invasión del derecho europeo sobre el nacional".

El partido de Giorgia Meloni, Hermanos de Italia, votó en contra de la propuesta, de ahí la polémica con respecto a la decisión. Ya saben, Meloni es ultra, fascista, admiradora de Mussolini, representante de la extrema derecha y ultraderechista. Además, se ha comenzado a especular con una nueva ley que prepara su Gobierno, que no para de crecer en popularidad y apoyos, en la que se prohibiría a las parejas homosexuales que inscriban a sus hijos en el resgistro con ambos como progenitores. En concreto, la norma se enfocaría en los nacidos o por fecundación asistida o por maternidad subrogada. 

Ojo, que Meloni en ningún momento ha ocultado su opinión acerca de este tema. En plena campaña electoral un activista LGTBI interrumpía un acto de la líder de Hermanos de Italia recriminándole que su formación se opusiera al matrimonio entre personas del mismo sexo o la adopción por parte de parejas homosexuales. 

La italiana le explicó que ya existen las uniones civiles y le expuso su visión sobre la adopción. Aclaró que no es porque crea que las parejas del mismo sexo tengan "menos valor", “también considero justo, para entendernos, que el Estado italiano no permita la adopción por parte de solteros y creo que no me dirás por esto que soy ‘solterófoba’, al igual que no soy ‘homófoba’". 

“Lo considero justo porque creo que un niño tiene derecho a crecer con un padre y una madre. Crecí en una familia monoparental. No puedo decir que no estaba feliz, pero ¿eché de menos un padre? Sí, no puedo negarlo. Si digo esto, ¿le quito algo al amor incondicional de mi madre? No”, aseguró Meloni.