"No leen el proyecto de ley y por eso no salen de sus falsedades", aseguraba ayer mismo el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, sobre su reforma.

Esta reforma es el claro ejemplo de una estrategia sanchista de manual: publicito una reforma con cosas que son buenas a priori, para 'colar' lo que verdaderamente quiero: cargarme la independencia judicial. Y ojo, no lo decimos nosotros, que en opinión del ministro difundimos falsedades, sino los jueces y fiscales que han llevado a cabo un paro a las 12 del medio día este miércoles, en protesta por la llamada ‘Ley Bolaños’.

Los convocantes han insistido en desmarcarse de "cualquier intento de politización o uso partidista de esta protesta", que se erige en defensa de "los principios básicos de nuestro sistema, de nuestro estado de derecho y de las condiciones profesionales de jueces y fiscales".  

 

 

Por ejemplo, Fátima Beardo, de la Asociación Profesional de la Magistratura, en el propio paro: "quieren intentar manejar la carrera judicial a su antojo", "porque demostramos nuestra independencia día tras día".

Por ejemplo, la presidenta del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Isabel Perelló: "el proceso de selección de jueces y magistrados" para integrarlos en la carrera judicial corresponde "en exclusiva" al CGPJ, "que velará por la estricta observancia de los principios de mérito y capacidad y por su adecuada formación técnica".

Igualmente, ha asegurado que el órgano de gobierno de los jueces es consciente "de las inquietudes sobre diversas materias que en laactualidad atañen de plano a la justicia", que son "en gran parte" compartidas por el CGPJ, "como ha quedado reflejado en los informes que este órgano ha elaborado sobre determinados proyectos normativos sometidos a su consideración".

Perelló parece que advierte el Gobierno, "tiene como límite el respeto a la Constitución y no puede desviarse de la configuración del poder judicial como un poder rodeado de las garantías que lo hacen digno de ese nombre ni tampoco puede el legislador degradar el estatuto de los jueces ni afectar negativamente aspectos que atañen a principios sustanciales o nucleares como son la independencia, el mérito y la capacidad".

Que la Fiscalía asuma labores de instrucción sin garantizar autonomía, pretender que la UCO dependa de la Fiscalía como instructora, motivo por el que la Guardia Civil se ha sumando al paro, pretender que la preparación de los opositores, futuros jueces y fiscales, cargue a cuenta del Gobierno, y, en definitiva, acabar con la independencia judicial, son las razones que han llevado a todas las asociaciones a unirse. Bueno todas no, porque Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD) y Unión Progresista de Fiscales (UPF) no han acudido. Desde las protestas, jueces y fiscales piden "la retirada de ambos proyectos", de no producirse, "no descartan la huelga".