El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha reunido con los diputados y senadores del PSOE para diseñar las líneas de actuación de cara a la apertura del curso parlamentario, donde ha dado la voz de alarma ante "un neoliberalismo más peligroso que el del pasado" que se une con la "extrema derecha" que ya gobierna en varios países. Ante esto deja claro que "España es un ejemplo" y que "no os vamos a decepcionar". 

"Somos una referencia en Europa de cómo hacer bien las cosas, de cómo se puede avanzar y dignificar los derechos de las personas, de cómo se puede reforzar el Estado del Bienestar o luchar contra el cambio climático. España exporta sus ideas, ya no buscamos ejemplos de políticas fuera porque el ejemplo somos nosotros. Es un modelo de éxito que funciona, que no tiene burbujas ni pelotazos", ha añadido.

Eso de que el PSOE es un referente en Europa de cómo hacer bien las cosas tiene su gracia, cuando todo el entorno de Pedro Sánchez está siendo investigado por presuntos delitos: su mujer Begoña Gómez, su hermano David, su exnúmero dos José Luis Ábalos o su Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz...

"Queda mucho por hacer y eso siempre lo hacen los socialistas. España siempre adelanta por la izquierda". "Tenemos el proyecto, tenemos el mejor grupo parlamentario, un equipazo en el Consejo de Ministros y las mismas ganas de afrontar este reto". Aunque ha reconocido que las negociaciones "cuestan mucho". 

El presidente también se ha referido a empresas como Amazon, Google y McDonald’s, con estas palabras: "No permitáis que se dé un paso atrás en políticas de diversidad de género. He visto en la prensa internacional que grandes empresas norteamericanas relacionadas con la consultoría y que también operan en España planean a renunciar a sus objetivos de diversidad e inclusión. He pedido a los ministros de Igualdad y Economía que convoquen a estas empresas para que corrijan este error y para dejarles claro que este Gobierno y España no va a renunciar a la igualdad. Queremos ser el primer país del mundo que cierre la brecha de género y no vamos a aceptar que nadie, ni tan siquiera un operador privado, se aleje de este objetivo legítimo". 

En definitiva, el presidente del Gobierno ha mostrado una vez más su talante autoritario al pretender imponer a multinacionales que no son españolas lo que tienen que hacer como política de empresa. 

"Nuestro objetivo es avanzar en derechos sociales y volver a ganar las elecciones municipales autonómicas y generales", ha afirmado Sánchez, que ha descartado cualquier adelanto electoral,  asegurando que "les ganaremos en 2027" y que mientras llega esa fecha "recuperaremos terreno en las municipales y autonómicas”.