En el mundo la necedad crece a la velocidad de la luz. Ahora resulta que las personas obesas también son culpables del aumento de las emisiones de CO2. Como se entere Ángela Rodríguez ‘Pam’... Recuerden que a la podemita le gustaría que “otras mujeres con cuerpos diversos también sientan que el espacio público y el poder es también para ellas”.

Investigadores de la Universidad de Auckland (Nueva Zelanda) han alertado de que el aumento de las tasas de obesidad están elevando las emisiones de gases de efecto invernadero. En concreto, apuntan a que estas personas producen más CO2 a partir del metabolismo oxidativo (esto es una muestra de lenguaje finísimo) que las que tienen un peso normal, y también provocan que aumente la producción y el transporte de alimentos y bebidas consumiendo más combustibles fósiles. ¡Qué horror! Así a las vacas pedorras se unen ahora las personas obesas... como culpables de más emisiones. ¿Qué será lo siguiente? Más necedad seguro.

Por cierto, dicha investigación no luchará contra la gordofobia, algo que no gustará ni a ‘Pam’ ni a la influencer Mara Jiménez, quien expulsó a una persona de una charla por proponer “dieta y ejercicio físico” contra la obesidad.