Una vez más, la incoherencia de Teresa Ribera ha quedado al descubierto.

La vicepresidenta ecológica carga contra los que niegan el cambio climático, al preguntarse si alguien que lo rechaza puede abordar los desafíos económicos y sociales. En esto se puede ver cierta alusión a Vox, pues ya saben que Ribera está haciendo su particular campaña de cara al 23-J a través de Twitter, y eso que la campaña electoral no comienza de forma oficial hasta el 7 de julio.

Claro que al mismo tiempo hay quien se pregunta si alguien que desprecia la contribución de la energía nuclear puede abordar el desafío del cambio climático. Se trata de Alfredo García (más conocido en Twitter como Operador Nuclear), ayudante de jefe de turno en la central nuclear de Ascó, que tiene licencia de operador de reactor y supervisor, y también es ingeniero de Telecomunicaciones, licenciado en Comunicación Audiovisual y divulgador científico. Recuerden que hace unos meses lanzó una campaña para salvar las nucleares españolas, porque su cierre elevará el precio de la luz, las emisiones y la dependencia energética.

Pero Ribera hace oídos sordos e insiste en querer cerrarlas, pese a que generan el 20% de la electricidad de nuestro país y lo hacen sin emitir CO2. Son muchos los expertos que señalan que la energía nuclear es el mejor complemento de las energías renovables y que contribuye a luchar contra el cambio climático.

Y se debe rectificar el cierre de los siete reactores españoles, si no se quiere repetir el error de Alemania

Y en paralelo y como guinda al pastel, Ribera también tuitea sobre “la actitud desafiente y la negación de la defensa ambiental” de los peperos al hilo del rechazo del Partido Popular Europeo (grupo en el que está incluido el PP) a la Ley de Restauración de la Naturaleza en la UE, la cual pone en peligro la actividad de agricultores y pescadores