- La derecha española ya no lucha por la libertad sino por la democracia: malo.
- Democracia como imperio, no de la ley sino de la mayoría.
- Y la izquierda ya no lucha por la justicia sino por los derechos. Peor.
- Derecho a recibir subvenciones con el dinero de los demás, naturalmente.
La cuestión catalana ha servido para certificar que la derecha española, el Partido Popular,
Mariano Rajoy y Soraya Sáenz de Santamaría, pero también los separatistas del PDCAT, ya no luchan por las libertades públicas, que era lo tradicional, sino por la democracia. Pero
la libertad es mucho más importante que la democracia. La libertad es condición 'sine qua non' del ser racional llamado hombre. La democracia, tan sólo un sistema de Gobierno, aunque se trate del peor de todos excluidos todos los demás.
Lo de la izquierda es igual de malo o peor. Ya no habla de igualdad y justicia sino de derechos. Derechos que significan, ante todo, recibir algo de la comunidad a cambio de darle lo menos posible. Es decir,
derecho a recibir subvenciones del dinero de los demás.
Con Cataluña hemos hecho mal negocio. Aunque lo llevamos perpetrando desde mucho antes.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com