Sr. Director:

Se celebran los 775 años de la Reconquista de Sevilla del poder de islam, por lo tanto, su recristianización, perdida desde la gloriosa época de San Isidoro de Sevilla, el hombre más culto de su tiempo con las Etimologías. Fue la estrategia de Fernando III, el Santo, en la guerra y la prudencia en la paz, las que llevaron a buen puerto la hazaña de la Reconquista de Sevilla, lo que supuso un hito para la expulsión del islam invasor del Al-Ándalus, que culminarían Isabel y Fernando, los Reyes Católicos, con la toma de Granada.

San Fernando con perspicacia supo comprender que con un cerco a la bella y rica Hispalense, no lograría su objetivo, por ser un medida muy peligrosa y costosa en vidas humanas y despilfarro económico. Por lo que ideó un plan más efectivo como fue derribar el puente que unía el centro de Sevilla con su barrio más popular, Triana. La reconquista se llevo a cabo por el mar, la armada castellana comandado por el Almirante Bonifaz logró el objetivo, siendo la primera operación bélica de la flota de Castilla que partiendo de las costas portuguesas llegó a Sevilla en 1248. Los soldados celebraron la caída de las murallas hispalenses, mientras el Santo Rey atribuyó la victoria a las que llamaría Nuestra Señora de los Reyes. De nuevo como en Covadonga siglos antes, Nuestra Señora estaba presente en la proeza de la Reconquista. La caída de Sevilla no supuso ninguna venganza ni exterminio entre los moros, el Rey San Fernando magnánimo estaba más preocupado por las personas que por las murallas. Tomada Sevilla el Santo Rey con prudencia y suave energía pudo integrar a los moros con una política de tolerancia. Incluso en las ciudades que no conquistaba, lograba alianzas. Logró entrar en Córdoba. La conquista de la capital califal supuso para los moros un golpe impresionante. La gran mezquita se convirtió en Catedral e hizo que hombros de prisioneros moros devolvieran a Santiago de Compostela las campanas que fueron llevadas a Córdoba  por el sultán Almanzor.  Con la reconquista de Córdoba se hizo posible la de Jaén y Murcia. En 1260 se produce la reconquista del Al-Al-Ándalus por parte de su hijo Alfonso X el Sabio con la salvedad del reino moro de Granada que comprendía Málaga y Almería.

San Fernando muere en 1252 cuando trataba de organizar una intervención en el Norte de África que impidiese la reactivación de la amenaza musulmana que siempre procedía desde este territorio, (amenaza que vuelve a resurgir en la actualidad con los intentos de Marruecos de atacar Ceuta y Melilla). San Fernando es, sin duda uno de los reyes más relevantes de la monarquía española no solo por su Santidad sino por los servicios prestados a la unidad de España, al dar un empuje definitivo a la Reconquista. Fue canonizado por el papa Clemente X. Su hijo Alfonso el Sabio, lo describe como profundamente temeroso de Dios, fiel discípulo de Jesucristo y devoto filial de la Virgen María a cuya protección atribuía sus victorias- Nuestra Señora de los Reyes. Rey culto amante del arte construyó catedrales como la maravillosa de Burgos; fundó la universidad de Salamanca. Varón esbelto, aficionado a la música a los juegos de mesa y torneos. De conversación amena y convincente. San Fernando siempre fue considerado compatrono de España con Santiago apóstol, a quien consideraba como su Alférez Mayor.