Sr. Director: Si nos atenemos a los acontecimientos ocurridos en los últimos día en Cataluña y sus relaciones con el Estado, Mas se dispone a llevar hasta el extremo su aventura negándose a acatar la ley, en un intento patético de convertirse en víctima de la Constitución que juró defender y a la cual debe todo el poder que ha ejercido. Y la peor consecuencia de su deslealtad jurídica y política es la de haber dividido inútilmente a la sociedad catalana, auténtica víctima del delirio separatista. No obstante, la propia lógica del Estado de Derecho ofrece todas las garantías al conjunto de los catalanes, de que el Estado mantendrá el funcionamiento de las instituciones. Mientras, la aplicación de la ley seguirá su curso hasta las últimas consecuencias, en defensa, precisamente, de Cataluña. Suso do Madrid