Sr. Director: La entrevista mantenida por Rajoy y Rivera la semana pasada, aunque no podemos decir que haya sido fructífera, al menos parece dispuesta abrir barreras. Por supuesto, la suma de los escaños del PP y de Ciudadanos no es suficiente para que, llegado el caso, el candidato a la presidencia pueda pasar sin escollos su reválida en el Congreso. Ahora bien, todavía nos encontramos en pleno desarrollo de ese absurdo juego de pillos en el que todos quieren resultar vencedores y nadie sentirse pillado. Lo curioso es que, realmente, los tres partidos constitucionalistas podrían llegar juntos fácilmente a la meta final de imponerse el sentido común, en este caso el sentido de Estado, mediante la ya desechada "gran coalición". Pero ahora queda por ver si Pedro Sánchez persistirá en su "no" frente a un bloque posible de 170 escaños y un programa de gobierno muy similar al que pactaron tiempo atrás PSOE y Ciudadanos. De momento nos quedan unos días de cierto sosiego negociador. Lo más duro será el día después… Jaume Catalán