Huye de los periodistas
Quien fuera vicepresidente económico hoy no es nadie. Está fuera del foco de los periodistas, de la atención de la opinión pública. Sus opiniones ya no importan. Pero es que además, el propio interesado -o afectado- huye de la prensa. Trata de pasar desapercibido, entra por puertas discretas, viste discretamente y se gira discretamente si considera que se le puede acercar algún plumífero. Curioso. Será que las pensiones dependen de su silencio.