• La venta de activos no estratégicos no es suficiente.
  • Eso sí, se esta cumpliendo el plan de desinversiones y acotamiento de tamaño de Bankia.
  • El balance es todavía muy débil: cae el margen de intereses, el ratio créditos/depósitos sigue en niveles peligrosos y la morosidad aumenta.
  • Las dotaciones para preferentes en 2013 se elevan a 825 millones de euros.
  • La tarea más importante para Gorigolzarri será recuperar la confianza de los clientes en la entidad.
  • Según José Sevilla, el crédito aumentará en 2014.
  • En el cuarto trimestre el grupo venderá tantas viviendas como en el resto del año.

En castellano tenemos un refrán que dice que el que no se contenta es porque no quiere. Esto parece que le ha pasado a Bankia  y  a su grupo BFA. Vienen de unos resultados negativos de 7.779 millones de euros en el grupo BFA y  de 7.060 millones de euros en Bankia.

Anunciar ahora unos resultados positivos de 648 millones de euros puede resultar un sarcasmo. Sobre todo, después de ver, a lo largo de los últimos meses la batería de ventas de los ahora llamados 'activos no estratégicos', tales como: el Hotel Westin en Valencia, tres carteras de créditos fallidos por un volumen de 1.353,9 millones de euros de deuda (esta venta, además, ha mejorado las cifras de balance y ratio de morosidad pues ha excluido del cálculo este importe), venta del negocio de comercialización de activos inmobiliarios, venta de Bankia Bolsa S.V., alquiler de la Torre Foster más la venta de sus participaciones en Indra, (20,14%) y Mapfre (12%). A este ritmo, o los resultados de gestión de Bankia  empiezan a mejorar, o no va a quedar nada para vender en un corto plazo, antes de que la maquinaria de la red dé pasos significativos.

Después de todas estas ventas, a esos resultados 'positivos' hay que ponerles muchos peros. El principal, el balance, que aún se tambalea: un margen de intereses que sigue descendiendo de forma constante (29,2%) en los últimos nueve meses, un ratio LTD (créditos/depósitos) que algo ha mejorado, pero que aún se sitúa en 116,7%, una cifra peligrosa que, en otro sector que no fuese el bancario y en la actual coyuntura, tendría una calificación de connotaciones muy serias. Una tasa de morosidad del 13,56%, esto es, 19.033 millones de euros, que le han obligado a dotar 11.920 millones, lo que supone un 62,63%.

Esta cifra, muy probablemente, se ha de ver incrementada pues Bankia tenía, a septiembre de 2013, un total de 23.938 millones de euros de créditos refinanciados con los antiguos criterios, que normalmente han de generar otro buen contingente de morosos, tan pronto empiecen a incumplirse los pagos aplazados por las carencias acordadas.

Además de las cifras, están las incertidumbres que planean sobre Bankia, tales como los procedimientos de arbitraje con las famosísimas preferentes, subordinadas y demás productos vendidos principalmente a clientes de 'ventanilla'. Aquí, Bankia ya ha provisionado 825 millones de euros durante lo que llevamos de ejercicio 2013. Cierre de oficinas y despidos de empleados: a fecha actual ya se han cerrado el 81% de las 1.143 sucursales que se estima han de cerrar, en  cumplimiento del plan de desinversiones y acotamiento que ha de cumplir la entidad en los acuerdos de viabilidad.

Y, sobre todo, lo más importante: recuperar algo que hasta no hace mucho tiempo eran premisas fundamentales en el sistema financiero: la credibilidad de sus actuales y potenciales clientes. Todo lo que ha pasado y está pasando últimamente con estas entidades es tan turbio que se va a tener que trabajar muy duro para recuperar estos intangibles, a veces más importantes que cualquier cifra económica.

Durante la rueda de prensa de resultados, el director general de Presidencia de Bankia, José Sevilla (en la imagen), ha manifestado que el objetivo de la entidad continúa siendo el mismo: cerrar el año con un beneficio de 800 millones de euros. En cuanto al flujo del crédito en el sistema, Sevilla cree que a lo largo de 2014 irá creciendo. Y lo ha dicho como lo dicen todos los banqueros de este país, esto es, en tercera persona, como si el crédito no dependiera de ellos y fuera algo ajeno a ellos. En cualquier caso, el número dos de Bankia se ha mostrado más optimista que sus homólogos en el Sabadell, Santander y BBVA.

Otro asunto: la venta de viviendas de la SAREB. Según Sevilla, en el cuatro trimestre del año se venderán hasta 4.000 casas, esto es, el doble que en todo el resto del año. Y lo harán sin bajar los precios ni vendiendo por bloques.

Para terminar, una anécdota que deberían tener en cuenta en la Real Academia: Sevilla ha inventado un nuevo término: hibridista. No, no es un delincuente. Son los tenedores de instrumentos híbridos, es decir, de preferentes y deuda subordinada. Pues bien, más del 50% de los hibridistas que acudieron al arbitraje recuperarán  el 100% de su inversión y lo mismo ocurrirá, según Sevilla, con los que han ido por la vía judicial.

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com

Rodrigo de Silos

rodrigo@hispanidad.com