Sr.Director: A mi entender es la condición necesaria para tener o aspirar a una patente de corso; llámeme gorila si quiere, no me ofendo, tomo las cosas como de quien vienen, ni me tinga, poco importa si es blanco, negro, mulato o aindiado, si es turco, hispano, ruso, judío o persa, si es rico o pobre de solemnidad, leído o analfabeto. En otras tiempos y tierras para ser políticamente correcto se debía abjurar de la fe y se llamaron conversos, apóstatas o renegados para eludir la expulsión, conservar la cabeza sobre los hombros, y los bienes en la bolsa, sumar los de los que se iban o se resistían, el péndulo llegó al extremo de su viaje y volvió por donde había ido. La historia puede gustar o no, pero no es posible negarla o acomodarla al propio gusto.
Lo nuestro es mucho más sutil. Nadie sabe que es ser peronista y por ello todos pueden serlo sin renunciar a nada.
No es una ocurrencia, me he cansado de preguntárselo y escuchar a los que dicen serlo, pareciera que basta proclamarlo. Se puede ser peronista oficial, opositor o tenuemente crítico y vergonzante (se hicieron muchas buenas cosas, faltan otras) las generalidades nunca comprometen. El general o Néstor nunca hubiesen permitido esto¡¡¡carajo!!! Que yo sepa nunca se quedaron con las ganas de nada.
En otros casos lo son por esa morbosa tendencia argentina a victimizarse, el perseguido mueve a solidaridad y compasión hablo de los años que siguieron al 55.
Otros ensayan en el colmo de la hipocresía: el soy peronista y lucho desde adentro.
Pregunto yo, a fuer de ingenuo ¿Qué define a un peronista? ¿Qué lo distingue del que no lo es?
Si son argentinos, aman a su patria, se oponen a la explotación del hombre por el hombre y la entrega del país; yo también, pues parece que somos iguales y ello no es cierto ¿algo más?
Se me está escapando la esencia; no la tienen porque son todas poses y palabras que se lleva el viento y de sustancia nada o es una piel de cordero ¡valga la sutileza!
Para encubrir a un bolche, anarquista, trotzko, fascista, nazi, liberal social, capitalista o socialista caviar con vocación trepadora, es decir una mascarita versallesca que oculta la cara para hacer la porquería
Vuelvo al comienzo, sólo declararlo es la condición necesaria para tener patente de corso. A partir de allí hay cientos de casilleros dónde ubicarse, para estar a gusto e incluso ser respetable y políticamente correcto.
Puede creerlo o no, solo tiene que hacer memoria y recordar discursos y obras del general, del tío Campora, de Cafiero, de los dirigentes gremiales, de Menem, Duhalde, Narváez, Néstor y Cristina; la lista sería muy larga y para muestra basta un botón.
Desde hace 48 hs el dogma oficial ha sentenciado Urbi et Orbi que ser socialista o populista con la plata del estado es el peor crimen.
¡Carajo que nos la ponen difícil, como para dialogar estamos!
Sería prudente recordar otras sandeces que en su momento tuvieron jerarquía de consignas sagradas: la no injerencia en los asuntos internos de otros países y su soberanía, el respeto por salarios y aguinaldo que hoy pagan en cuatro cuotas, castigar la riqueza de asalariados y jubilados con impuestos a las ganancias y liberar de ese pago al juego, especuladores financieros y empresas mineras extranjeras o de los impuestos sucesorios cuando el finado es el marido y la viuda beneficiaria la que manda, decide y ordena a sola firma.
Usar y abusar en propio beneficio de los recursos del estado. ¡inclusión e igualdad peronistas! No es de hoy, desde el 45 es la misma historia, no hay peronistas buenos y malos, viejos o nuevos, serios o jodones, honestos y delincuentes, ordinarios o cultos, basta rascarles el barniz y tarde o temprano todos son iguales, no pueden esconder la hilacha ni la negra pata de la sota.
Con decir que son mayoría ya no les alcanza, necesitan ser todos.
No puedo negar que sueño con verlos reventar y no me refiero a los sentimentales por recuerdos de familia de los que todavía quedan algunos, me refiero a los que se pegaron una etiqueta a modo de pase libre a los otros los está diezmando la realidad y el paso del tiempo.
Presumo con racional certeza que poco tiempo les queda, en un país, una América y un mundo que claman al cielo por paz y orden fundados en la verdad y la justicia, en tanto ellos con la lengua o sus acciones solo dividen y enfrentan dentro de la nación y cruzando las fronteras.
Quizás la solución aparezca sola cuando todos nos saquemos etiquetas y dejemos de adorar pirámides y mausoleos; porque que hay idiotas mistificadores, no puede negarse de un lado y del otro; solución difícil si la hay, sería necesario que primero desapareciesen los que reescriben e interpretan la historia buscando una bandera para mostrar que no son impotentes cerebros tostados.
Entre los humanos basta que uno enarbole la bandera del no para que otros lleven al tope la del sí y claven una pica en Flandes, poco o mucho somos jodidos sin excepciones, más aún cuando la demostración viene con provocación incluida.
Como verá son solo explicaciones más o menos ajustadas a la realidad; la médula de la cuestión es impenetrable ser peronista es una utopía, simplemente no existe o es irrealizable. Una nada tan contradictoria que es capaz de contener todo, menos la verdad.
Comencé a escribir con la certeza que no tendría respuesta a la cuestión y de pronto¡¡¡Zas!!!¿Sin quererlo habré dado en el clavo?
El Peronismo es el sinónimo de mentira
Dicho esto forzosamente debe preguntarme viendo lo que hay ¿es lícito o moral pactar y aliarse con el error o usar patas de palo mentirosas para llegar?
Que fuese un recurso de piratas no me parece un solido argumento.
Leopoldo Silva
Lo nuestro es mucho más sutil. Nadie sabe que es ser peronista y por ello todos pueden serlo sin renunciar a nada.
No es una ocurrencia, me he cansado de preguntárselo y escuchar a los que dicen serlo, pareciera que basta proclamarlo. Se puede ser peronista oficial, opositor o tenuemente crítico y vergonzante (se hicieron muchas buenas cosas, faltan otras) las generalidades nunca comprometen. El general o Néstor nunca hubiesen permitido esto¡¡¡carajo!!! Que yo sepa nunca se quedaron con las ganas de nada.
En otros casos lo son por esa morbosa tendencia argentina a victimizarse, el perseguido mueve a solidaridad y compasión hablo de los años que siguieron al 55.
Otros ensayan en el colmo de la hipocresía: el soy peronista y lucho desde adentro.
Pregunto yo, a fuer de ingenuo ¿Qué define a un peronista? ¿Qué lo distingue del que no lo es?
Si son argentinos, aman a su patria, se oponen a la explotación del hombre por el hombre y la entrega del país; yo también, pues parece que somos iguales y ello no es cierto ¿algo más?
Se me está escapando la esencia; no la tienen porque son todas poses y palabras que se lleva el viento y de sustancia nada o es una piel de cordero ¡valga la sutileza!
Para encubrir a un bolche, anarquista, trotzko, fascista, nazi, liberal social, capitalista o socialista caviar con vocación trepadora, es decir una mascarita versallesca que oculta la cara para hacer la porquería
Vuelvo al comienzo, sólo declararlo es la condición necesaria para tener patente de corso. A partir de allí hay cientos de casilleros dónde ubicarse, para estar a gusto e incluso ser respetable y políticamente correcto.
Puede creerlo o no, solo tiene que hacer memoria y recordar discursos y obras del general, del tío Campora, de Cafiero, de los dirigentes gremiales, de Menem, Duhalde, Narváez, Néstor y Cristina; la lista sería muy larga y para muestra basta un botón.
Desde hace 48 hs el dogma oficial ha sentenciado Urbi et Orbi que ser socialista o populista con la plata del estado es el peor crimen.
¡Carajo que nos la ponen difícil, como para dialogar estamos!
Sería prudente recordar otras sandeces que en su momento tuvieron jerarquía de consignas sagradas: la no injerencia en los asuntos internos de otros países y su soberanía, el respeto por salarios y aguinaldo que hoy pagan en cuatro cuotas, castigar la riqueza de asalariados y jubilados con impuestos a las ganancias y liberar de ese pago al juego, especuladores financieros y empresas mineras extranjeras o de los impuestos sucesorios cuando el finado es el marido y la viuda beneficiaria la que manda, decide y ordena a sola firma.
Usar y abusar en propio beneficio de los recursos del estado. ¡inclusión e igualdad peronistas! No es de hoy, desde el 45 es la misma historia, no hay peronistas buenos y malos, viejos o nuevos, serios o jodones, honestos y delincuentes, ordinarios o cultos, basta rascarles el barniz y tarde o temprano todos son iguales, no pueden esconder la hilacha ni la negra pata de la sota.
Con decir que son mayoría ya no les alcanza, necesitan ser todos.
No puedo negar que sueño con verlos reventar y no me refiero a los sentimentales por recuerdos de familia de los que todavía quedan algunos, me refiero a los que se pegaron una etiqueta a modo de pase libre a los otros los está diezmando la realidad y el paso del tiempo.
Presumo con racional certeza que poco tiempo les queda, en un país, una América y un mundo que claman al cielo por paz y orden fundados en la verdad y la justicia, en tanto ellos con la lengua o sus acciones solo dividen y enfrentan dentro de la nación y cruzando las fronteras.
Quizás la solución aparezca sola cuando todos nos saquemos etiquetas y dejemos de adorar pirámides y mausoleos; porque que hay idiotas mistificadores, no puede negarse de un lado y del otro; solución difícil si la hay, sería necesario que primero desapareciesen los que reescriben e interpretan la historia buscando una bandera para mostrar que no son impotentes cerebros tostados.
Entre los humanos basta que uno enarbole la bandera del no para que otros lleven al tope la del sí y claven una pica en Flandes, poco o mucho somos jodidos sin excepciones, más aún cuando la demostración viene con provocación incluida.
Como verá son solo explicaciones más o menos ajustadas a la realidad; la médula de la cuestión es impenetrable ser peronista es una utopía, simplemente no existe o es irrealizable. Una nada tan contradictoria que es capaz de contener todo, menos la verdad.
Comencé a escribir con la certeza que no tendría respuesta a la cuestión y de pronto¡¡¡Zas!!!¿Sin quererlo habré dado en el clavo?
El Peronismo es el sinónimo de mentira
Dicho esto forzosamente debe preguntarme viendo lo que hay ¿es lícito o moral pactar y aliarse con el error o usar patas de palo mentirosas para llegar?
Que fuese un recurso de piratas no me parece un solido argumento.
Leopoldo Silva