Sr. Director:
Lo que no ocurre en ninguna nación democrática, pasa en España: El PSOE hace oposición a la oposición. La mejor defensa es el ataque continuo para desactivar propuestas del PP. En eso, Caldera, Rubalcaba y Blanco son consumados expertos.Si el partido de la oposición habla sobre algún tema que no conviene al Gobierno, sale inmediatamente uno del trío socialista, con tono lúgubre, y empieza a descalificar y con firmeza tacha de "extrema derecha" la proposición y santas pascuas.
Por eso, el Partido Popular debe hablar de lo que al Gobierno inquieta e interesa a los ciudadanos: la alianza del Ejecutivo con los separatistas, la negociación fracasada con ETA, la inmigración ilegal, la subida del índice de delincuencia, los sueldos y pensiones bajos, la recesión económica, el caos en infraestructuras y educación, las suculentas subvenciones que reciben las asociaciones ideológicamente próximas al
Gobierno, como el influyente mundo del cine y algunos medios de comunicación, la continua subida del paro y de los bienes de consumo, políticas en defensa de la vida y la familia... Éstos y muchos otros temas, sin complejos y ambigüedades con sus correspondientes soluciones.
Isabel Bermúdez Espejo
bermudezespejo@yahoo.es