El ministro de Industria, Josep Montilla, ha anunciado este viernes también una modificación del régimen tarifario. El déficit de tarifa fue en el 2005 de 3.000 millones, aunque según los cálculos de Industria, en el 2006 podría ascender a 5.000 millones. Montilla recuerda que fue precisamente ese déficit tarifario el que obligó a subir las tarifas el pasado 1 de enero un 4,48% y advierte que en caso de no haber introducido modificaciones, habría que elevar las tarifas un 30%. Esto como se pueden imaginar es inviable, porque existe un malo funcionamiento del mercado de producción eléctrico.
En concreto, lo que Montilla lamenta es que el vendedor y el comprador sean el mismo cerrando precios por debajo de costes, con incapacidad para responder al famoso déficit, así que ha optado por obligar a que el déficit sea digerido contra los márgenes de las compañías eléctricas propiciando una liberalización eléctrica para el 2011, fecha en la que sólo una habría una tarifa residual para el servicio universal.
¿Por qué pagar el déficit con el presupuesto si obedece a una concentración de precios? Se hizo de acuerdo al marco legal establecido, responde Montilla. O sea, pelillos a la mar.