Hay que pasar página a la historia y abandonar definitivamente el guerracivilismo. Y para ello, nada mejor que reivindicar a esas grandes figuras de las Segunda República, que como hemos informado- son un ejemplo para Zapatero de democracia y saber hacer.
Así que al mismo tiempo que se retira la estatua ecuestre de Franco de la plaza de San Juan de la Cruz, la estatua de Indalecio Prieto que preside los Nuevos Ministerios se mantiene. Pero no sólo eso. A Narbona le debe de parecer insuficiente que Prieto se encuentre en la calle y a la intemperie, así que ha decidido meterle en el hall del ministerio de Medio Ambiente. Se trata de una réplica a menor escala de la estatua que se encuentra en la calle. Pero esta no estará sometida ni a la lluvia ni a la guerra de huevos con pintura a la que le someten de vez en vez los involucionistas. Y es que Narbona no quiere quedarse fuera de la histeria por la memoria histórica en la que se encuentra el Gobierno Zapatero.