El Banco de España presiona al sector para que actualice balances en el cierre del ejercicio 2010: el saneamiento gota a gota no funciona

El gobernador paga ahora su indulgencia contable ejercida por razones de imagen. En el punto de mira del supervisor se encuentran varias cajas de ahorros-incluidas algunas fusionadas y la banca mediana. El sistema CCM no funciona, ahora lo que mola es el modelo británico.
Hasta el cierre del ejercicio 2010, el Banco de España ha sido especialmente indulgente con bancos y cajas de ahorros. Les ha permitido alargar la no actualización de balances y el retraso en saneamientos en la cartera de deuda pública, derivados, inmobiliaria y de crédito. De ahí, en parte, la mala fama de la banca española. Los seis bancos del IBEX (Santander, BBVA, Popular, Sabadell, Bankinter y Banesto) vieron descender su capitalización en un 30%, frente al 17% del conjunto del Ibex-35. En las primeras sesiones del año, la tendencia se mantiene: los bancos bajan un 4% frente al 3% del selectivo.

¿Qué ocurre? Pues que los analistas no se creen que los balances de bancos y cajas estén diciendo la verdad. Y ojo, porque estamos hablando del único sistema bancario relevante en la Unión Europea que no ha sido salvado con fondos públicos. Ahora bien, el saneamiento gota a gota no funciona y eso está poniendo nervioso al gobernador Fernández Ordóñez (MAFO). Para el supervisor, los bancos y las cajas no están saneando con la necesaria celeridad y aprovechan en demasía la indulgencia del inspector, indulgencia políticamente forzada por el propio MAFO para lucir una buena imagen del sector y del país.

Un ejemplo, antes de la crisis, en 2005, 2006 y 2007, la banca española saneaba a razón de 7.000 millones de euros por año. En 2009, dedicó a saneamientos 15.000 millones y sólo en el primer semestre de 2010 la cifra rozó los 10.000 millones.

Pero no basta. Otros países cuyos bancos estaban en peor situación, todo hay que decirlo, optaron por la nacionalización. El caso británico es sintomático: el Estado se quedó con la mayoría del capital, despidió a los gestores y ahora -¡Ay dolor!- deberá dedicar mucho dinero a recapitalizar las entidades. En España, la única entidad nacionalizada fue la CCM, pero se hizo por el viejo sistema de saneamiento del Banco de España: regalarla a otra entidad y, además, se saneó con dinero del Fondo de Garantía de Depósitos, es decir, con fondos del seguro pagado por las propias entidades.

Dicho de otra forma, el Banco de España presiona a las entidades para que aumenten sus saneamientos aunque den beneficio cero y aunque las previsiones (reducción del 20% del beneficio en banca y de entre el 60 y el 80% en cajas de ahorros) ya sean suficientemente duras. Una ventaja es que, dado que el mercado no reconoce los esfuerzos de la banca, ¿qué más da cerrar con beneficio cero? Pero, claro, no todos piensan así.

Además, recapitalizar no es tan sencillo: hoy en día pocos están dispuestos a comprar bancos hasta que no se sanee su cartera inmobiliaria, por ejemplo.

En resumen, el Banco de España se ha dado cuenta de que el saneamiento gota a gota, que él mismo propició, no funciona. Ellos mismos calculan que, a este ritmo, el saneamiento no terminaría ni en seis años, y tanto no se puede esperar. Es decir, que la presión sobre los bancos y sobre las cajas aumenta para el cierre de 2010 y que, además, MAFO ya amenaza directamente a los bancos con nacionalizar. En el punto de mira del supervisor se encuentran varias cajas de ahorros algunas SIP y la banca mediana. Para abrir boca, el Banco de España amenaza con subir los intereses de los créditos FROB o de hacerse con el control de la gestión en algunas fusiones frías.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com