La droga es el ataque más grave que sufre la sociedad actual. Un ataque cuyas consecuencias alcanzan a todos, pero son especialmente víctimas los jóvenes, nuestro caudal más valioso.
La Fundación de Ayuda contra la Drogadicción ha lanzado una acción de sensibilización ciudadana que trata de prevenir sobre las lacras colindantes con los estupefacientes que afligen tanto al usuario como a su ambiente hogareño.
Con el eslogan "Las drogas no sólo perjudican a quienes las consumen. Todo tiene un precio", el diseño publicitario insiste en que el enigma de los toxicómanos está sin dilucidar. Hay peligros que inquietan a las gentes. Múltiples estudios afirman que el derroche de narcóticos persuade de forma rotunda en la mitad del descalabro estudiantil, que está trece puntos por encima de la media europea. Un 30 por ciento en nuestro terruño frente a un 17 por ciento de Europa.
En los últimos años, incontables indagaciones han probado un cierto paralelismo entre el derroche de drogas y las situaciones de salvajismo de todo tipo. Según el informe Jóvenes, valores, drogas, un 10,90 por ciento de los adolescentes españoles de 15 a 24 años derrochan alcaloides por encima de la media y que son los que se justifican las conductas iracundas.
Clemente Ferrer Roselló
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