Sr. Director:
El artículo Sarkozy y Royal: dos caras de la misma moneda me recordó un incidente ocurrido en febrero de 1978 durante una visita a ciudad de México. Después de la boda de una prima que ocasionara la visita nos invitó a su rancho, cercano a la capital, el que fuera durante 15 años presidente de la Cruz Roja Internacional: Barroso Chávez.
Al entrar en la casa me percato que sobre las camas están depositas ametralladoras, al igual que guardias armados por todas partes, lista para la acción. No es visión que pase desapercibida ni interrogatorio que falle. Su respuesta, la de Barroso, sigue: "en mi experiencia como presidente de la Cruz Roja Internacional pude percatarme de que la violencia en las calles se origina o es permitida por el Gobierno de turno; se trata de otra formar de gobernar"
No sólo en la Península sino en todas partes es esa la "norma" tanto que en la Pax Americana en esta Isla mueren más, violentamente, que en la guerra de Irak.
Después de una larga batalla con el cáncer parece que el buen Dios quiere que me quede, asumo que no será para ir a la playa, por lo que me apresto a entrar en la palestra con todas las fuerzas que Él me otorgue.
Cancio Ortiz de la Renta
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