El carnet del PSOE y sus espléndidas relaciones con Alfredo Pérez Rubalcaba le catapultaron a la Comisaría General de Información, la pieza más importante del entramado antiterrorista, el mismo entramado que, todo hay que decirlo, está obteniendo grandes éxitos contra ETA y comienza a tenerlos contra las células islámicas. Hablamos de Telesforo Rubio, el hombre que mostró su proclividad socialista en la Comisión del 11-M.
Rubio ha creado mal ambiente a su alrededor por dos razones: su empeño en controlarlo todo y en no fiarse de nadie y su manía por filtra información, especialmente al Grupo PRISA. Recientemente, la policía francesa puso el grito en el cielo cuando, tras detener a un presunto etarra, envió las huellas dactilares a España para que fueran identificadas. En Madrid, alguien filtró a la prensa el nombre antes que a la policía francesa, quien se ha mostrado, un tanto molesta.
