Es el buzón del fraude laboral pero es más conocido como "el buzón de los chivatos". Se trata de que los trabajadores puedan denunciar, ante la Inspección de Trabajo, situaciones de fraude a la Seguridad Social. En definitiva, favorecer la delación.
Y ello ha obligado a la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Fátima Báñez, a aclarar en un curioso comunicado, la virtualidad del famoso buzón. El comunicado, oiga, no tiene desperdicio.
Asegura que se trata de luchar contra situaciones de explotación de trabajadores, empresas ficticias y acoso laboral y sexual. Todo muy loable pero también está dando lugar a que trabajadores resentidos se dediquen a lanzar falsas acusaciones contra su empresa o ex empresa.
En cualquier caso, sorprende la obsesión contra el fraude a la Seguridad Social de un Gobierno que apenas ha tocado los impuestos laborales. Si las cuotas no resultaran imposibles de pagar para muchas empresas no habría tanta economía sumergida y la labor del buzón de los chivatos.
Miriam Prat
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