El PP, preso de sus incoherencias, se ve imposibilitado de exigir responsabilidades políticas

 

La estrategia del miedo siempre funciona. Y los medios se apuntaron con fervor digno de mejor causa a informar detalle a detalle de la gripe A. Que si el primer muerto aquí, que si el segundo allá. Lo mismo que con las vacas locas: histeria colectiva. El PP aprovechó dicha histeria para hacer sangre: que si estamos llegando tarde, que otros países ya tienen la vacuna y nosotros no; que si Francia va a vacunar al 100% de su población y nosotros a un porcentaje muy inferior. Incluso los medios cercanos al PP calcularon el coste de la gripe A en términos de baja laboral por no vacunar al 100% de la población.
Mientras tanto, los médicos se negaban a vacunarse. No lo tenían claro los especialistas de la cosa. Incluso el comité de sabios de Sanidad concluye que la gripe A provocó más reuniones que pacientes. La propuesta de los sabios era esperar y ver. Esperar porque la vacuna -contra lo que se dijo- no había sido probada. Hay que esperar a que el virus deje de mutar. Y además, censuraron que se comprara demasiado. Demasiado y demasiado pronto. Por supuesto, los sabios tenían razón. Pero la ministra estaba más preocupada de la opinión pública y de los azotes de la oposición que de la realidad y la evidencia científica.
El resultado es que países como Polonia que optaron por esperar se encuentran ahora en una situación mucho mejor que la nuestra: nosotros les hemos hecho de conejillos de indias y estamos en disposición de ofrecer nuestros sobrantes a precios ridículos. El hecho de que Polonia esperara y nosotros no demuestra que el dictamen de la OMS era pura recomendación, de seguimiento no obligatorio.
¿Por qué el PP no exige responsabilidades políticas? Porque el PP es fruto de sus contradicciones populistas. En su momento pidió vacunas ya para el 100%. Ahora teme que alguien le de al replay. Lo mismo que con la inmigración. Rajoy abraza la postura de Vic hasta que le sacan que el empadronamiento obligatorio y universal lo aprobó un tal Rajoy. Y lo mismo ocurre con el Rafita. La sociedad está sensibilizada y el tal Rajoy sale a reclamar prisión perpetua. ¿Hasta cuándo? No se pueden lanzar mensajes al calor de los sucesos del día.